Johan (Into the Darkness)

Capítulo 14

Me había quedado dos horas esperando, dos horas esperando por él.

Me sentía estúpida, Johan me la había hecho y aunque, tal vez suene tonto e inclusive patético pensé que vendría y que pasaríamos una linda noche.

—¿Ally? —escucho la voz de Keith llamarme, después de saludar Keith decidió hacerme compañía, no me sentía con ánimos de tenerla pero no me atreví a decirle que no, después de todo él sólo trata de portarse bien conmigo sin ninguna necesidad.

—Perdona, me quedé pensando.
—le digo y él asiente con una sonrisa. Aveces me pregunto como personas como él pueden sonreír ante todas las cosas por que yo no puedo hacerlo y cuando trato de hacerlo me sale más como una mueca que como una sonrisa.

—Esta bien, hablaba sobre la fiesta que hay en la fraternidad ¿Te apetece venir?

Su ofrecimiento me tienta pero me niego a aparecer por ahí para que Johan se burle de lo tonta e ingenua que fui al creer en sus palabras y sobre todo al creer que tendría una cita con él. En estos momentos debe estar disfrutando de la compañía de Bonnie mientras que yo esperaba por él.

—La verdad es que no me apetece aparecer por ahí —confieso y él vuelve a asentir.

-*-

A la mañana siguiente me despierto gracias a la molesta alarma que con esfuerzo apago,  es sábado y no me apetece levantarme de la comodidad de mi cama y cálido ambiente de mis sábanas.

Vuelvo a cubrirme con las sábanas hasta quedar completamente cubierta y cierro los ojos. Sin embargo, mi descanso no dura ya que mi puerta es tocada por lo que suelto un bufido.

Mis ojos se abren, pero dispuesta a no levantarme espero a que los toques se apaguen para poder volver a cerrar los ojos.

Los toques se vuelven más frecuentes y con un gruñido trato de levantarme. A mi cabeza llega la idea de que tal vez se trata de Johan como algunas veces que suele ser un completo imbécil llega y se disculpa y yo como toda una idiota caígo.

Pero esta vez me aseguraría de que no fuera así, era suficiente, Johan no podía seguir engañandome con sus palabras y mucho menos podía seguir engañandome yo pensando cosas que no sucederán.

Me planteó varias cosas que podría decirle, como podría insultarle y sobre todo como podría echarlo de mi vida de una vez por todas.

Camino decidida aunque hace un rato lo único que quería hacer era quedarme en cama y dormir sin saber de nada y de nadie, supongo que es el hecho de que ayer un imbécil me dejará plantada. Tallo mis ojos con ambas manos tratando de despertarme y con la fuerza que necesito para enfrentarme al que yo creo que se trata de Johan abro la puerta.

Mis ojos se abren como platos, mi boca se abrió en una perfecta O y mis ojos ardían junto con mi cuerpo que se había quedado congelado tomando el pomo de la puerta.

—Hola cariño —dijo él del otro lado de la puerta con una sonrisa que podría hacerme desmayar, yo seguía congelada. Sus ojos azules escaneaban cada detalle de mi rostro con su impasible sonrisa mostrando sus blancos y deslumbrantes dientes.
—Bueno, no era el recibimiento que esperaba. Pensé que te lanzarías a mis brazos y me besarias efusivamente —murmura sin dejar de sonreír. Salgo de mis pensamientos y me lanzó a él envolviendo mis brazos alrededor de su cuello y enrrollando mis piernas alrededor de su cintura —Esa es mi chica. —le escuché decir mientras reía y me apretaba contra su grande y fuerte cuerpo.

Liam me dejó tocar el piso y me miro unos segundos antes de tomar mis mejillas acercándose lentamente.

Por mi cabeza pasaron todos esos recuerdos que me hicieron sentir mal conmigo misma y con Liam. Mientras que él estaba en Canadá esforzándose por demostrar que podía hacer las cosas como debían en el intercambio, la persona a la que ama estaba enrollandose con un chico que nisiquiera sentía lo mínimo. Pero dispuesta a dejarlo atrás y seguir con mi vida con Liam tomé su cuello acercandolo a mi boca para tratar de demostrarle todo eso que siento por él. Y, esperando a que aquella corriente que acostumbraba a sentir cuando besaba a Johan llegará, me abraza aun más a él. Sin embargo, esa corriente eléctrica no llegó.