Y en medio del desastre que es mi vida hoy,
tu presencia me sabe a paz.
Y si me preguntan qué amo más de ti, no sabría qué contestar;
si debo elegir entre tus labios y tu voz,
me quedaré mil veces con tu voz,
porque prefiero siempre oírte hablar
antes que nunca poderte besar.
NJ