-I-
No sé porque continúo enamorandome, cuando reflexiono y observo en mi interior, descubro que la culpa es toda mía por dejarme llevar en mis sentimientos. Pero aún así, ¿por qué sigo enamorandome?
Tantos malos ratos me hicieron pasar los falsos amores, tantas lágrimas...
Pensando bien, agradezco haber llorado tanto; con cada lágrima derramada descubría una verdad sobre mí mismo, sobre mis sentimientos, sobre las relaciones entre dos personas.
Últimamente estuve hablando tanto del amor, que a fuerza de hablar sobre él, me encontré enamorado de una amiga que terminaba de conocer. ¿Su nombre? No importa cuál es su nombre; lo que quiero decir con eso es que la trampa del enamoramiento es tan grande que todas las personas (sin excepción) caen en ella por lo menos una vez en la vida...
-II-
Era tres de mayo la primera vez que me acerqué a hablarle formalmente (ya le había hablado una vez y fueron como 10 segundos en lo máximo), hace más de una semana que admiraba a cierta distancia su belleza. Esos ojos marrones, ese cabello no tan claro ni tan oscuro, esa piel clara y sus labios de un rojo claro. Desde la primera vez que mis ojos pasaron por ella noté algo diferente, me percaté que ella no utilizaba maquillaje, su belleza era natural y eso me resultaba hipnótico.
Emprendí la marcha para ir y hablarle, fué solo una conversación normal entre un hombre y una mujer. Obviamente yo tenía segundas intenciones, ¿qué hombre no las tiene? Aunque, claro, no lo demostraba en un simple "hola, cómo estás?" O en un "nos conocemos de algún lugar? Creo haberte visto antes". Todo lo que en ese momento decía fue solamente para romper el hielo e iniciar una conversación, yo no la conocía, ni ella me conocía a mi. Lo cual lo hacía todo más fácil; yo podía ser quien quisiera, pero elegí ser yo mismo...
-III-
Podría decir que esa chica me volvía loco, pero estaría mintiendo si dijera eso, ella me dejaba mucho más que loco... Una semana más o menos fue lo que hablamos por teléfono, día y noche, sin parar; y como teníamos un horario en común al salir de un "ensayo" del colegio, nos encontrabamos todos los días, y eso era increíble... Verla después de esos ensayos era lo mejor, me encontraba en paz al mirarle los ojos, al oler su perfume, al escuchar su hermosa voz.
-IV-
El día diez de mayo, cuando los ensayos terminaron fuí a buscar a mi linda señorita. No se imaginarán lo mal que me sentí al verla, ella estaba llorando y hasta hoy en día desconozco el motivo. Mientras ella secaba sus lagrimas fuimos al Lunch que queda en la esquina del colegio; yo no sabía qué decir, la miraba y tenía ganas de abrazarla, tenía ganas de decirle "todo va estar bien". Pero preferí no hacerlo, a ella no le gustaba que parezcamos novios, ya que no lo éramos.
Nos sentamos en dos sillas, separados de todos los demás; estabamos debajo de un árbol (no recuerdo de qué tipo), y hablábamos sobre temas vanos porque yo hacia de todo para hacerla reír... Cuando por fin conseguí sacarle una sonrisa me sentí el macho alfa, el mejor hombre de todos, así es como ella me hacía sentir: un héroe que solo quería su felicidad.
Cuando nos sentíamos más cómodos en ese lugar que hoy es especial para mí, otras personas se acercaron, llevando sillas y algo para tomar y pasar el rato entre amigos. Como mi linda señorita y yo estábamos prácticamente en la ronda de esos "amigos", nosotros también pasábamos el rato bebiendo con ellos; no eran bebidas fuertes, solamente era vodka con jugo (mucho más jugo que vodka), y es ahí donde inició el lío...
-V-
La chica que tanto me gustaba, a la que yo tanto intentaba proteger y hacer felíz, no tenía un hígado fuerte que digamos y cayó presa de los efectos del alcohol; grácias a Dios no estaba tan mal, aún estaba conciente de todo lo que pasaba.
Estoy más que seguro: si yo no hubiese estado con ella en ese momento, en ese lugar, posiblemente más de uno de esos jóvenes se hubiesen aprovechado de su condición. Y estoy seguro también que si esa señorita no me gustase tanto, yo la hubiese abandonado a su suerte.
Esa tarde del diez de mayo, cuando el alcohol invadió su organismo, yo la empecé a cuidar, y no sólo de los demás, sino que de ella misma... Más de una persona tenía intención de besarla, y no dejé que nadie se acercase a ella porque en el fondo también quería probar un beso suyo, pero no con ella en aquel estado, no en esas condiciones. Pero pasó lo inevitable, ella y yo estabamos parados uno frente al otro, todos habían vuelto al colegio por el ensayo que también habría esa noche... Si pudiera volver en el tiempo hubiese evitado que ella tome, pero no me arrepiento del primer beso que nos dimos. Al mirar sus bellos ojos podía ver su esencia, y puedo decirlo, ella podría haber estado semi-conciente, un poco embriagada y con un sútil olor a alcohol casi imperceptible al olfato; pero para mí, sin importar el ángulo por el cual mirase, ella era la chica más bella del mundo. Y el beso que en ese momento nos dimos fue el más dulce que jamás dí.
Sentir sus labios contra los míos, sin mucha presión como para sentir cada movimiento, su lengua sutilmente encontrándose con la mía como si fuese un beso tímido, mis brazos agarrando su cintura por ambas manos y presionandola ligeramente sobre mi cuerpo para sentir su calor y que ella pudiese sentir el mío...
Volvimos a sentarnos en el mismo lugar dónde estábamos antes del beso, ella reposando su cabeza en mis hombros mientras que yo no hacía más que oler su perfume. Y si no hubiese estado tan idiotizado por su encanto escribiría lo que nos dijimos antes de darnos un segundo beso estando ya sentados. Y solo una cosa me devolvió a la realidad; entre besos, en plena esquina del colegio (aúnque no había nadie para escuchar) ella me dijo: ¿Cómo llegamos tan lejos?
Mi alma cayó al piso en pedazos al escuchar aquellas cuatro palabras, y entonces ambos adoptamos una actitud de habla alejándonos unos cuantos centímetros uno del otro, y continuamos una conversación normal, como si nada hubiese pasado.
El ensayo del colegio había empezado hace unos 15 minutos cuando ambos fuímos para allá, nos despedimos y nos separamos cada uno por su lado, ella con los suyos y yo con los míos.***Espero les haya gustado el primer capítulo de mi pequeña historia, aún la estoy viviendo, así que sacaré un nuevo capítulo a cada semana. Muchas gracias por leerlo.***
ESTÁS LEYENDO
Mi linda Señorita
Teen FictionEl amor siempre fue algo que nosotros, los humanos, quisimos experimentar. Siempre tuvimos enamoramientos que muchas veces terminaron de una mala manera, todo eso porque el enamoramiento es un estado en el cual nuestro intelecto se empobrece, se est...