Todos nos encontramos en el patio para el almuerzo. Olivia y yo estamos llegando de cálculo, donde estoy muy segura que estaba flirteando con Mr. Stetzler. Quiero decir que está flirteando, definitivamente, pero por una parte no estoy segura de porqué. Mr. Stetzler es viejo. Como de cuarenta años. Me refiero a que, cuando flirtea con Mr. Davis, lo entiendo porque él enseña Educación física y es lo bastante joven para todavía llevar el pelo largo. ¿Pero Mr. Stetzler? ¿En serio?
—Eres super —le dice antes de que dejemos la clase, lanzando el pelo sobre su hombro. Ni siquiera sé lo que se supone que significa, y aparentemente tampoco Mr. Stetzler porque sólo se quita las gafas y el tipo parpadea unas pocas veces en rápida sucesión. Cojo el brazo de Olivia y la arrastro hacia fuera, y se agita y menea los hombros de la manera en que lo hace con Ben. De la manera que solía hacer con el Belga.
El Belga es ese chico de nuestra clase que se mudo aquí desde Bruselas. Esto sucedió en algún momento entorno a Septiembre del año pasado, y él y Olivia pasaron todo el otoño juntos. Comenzó a comer un montón de coles de bruselas y comer gofres belgas a donde quiera que saliésemos. Incluso las escogió por encima de las rosquillas, con lo que Charlie no estaba de acuerdo. Eso fue cuando Olivia y Taylor se tomaron un descanso, así que ella nunca había llamado al Belga su novio. Nunca siquiera le llamó Jhone, el cual era su verdadero nombre. El sólo era “el Belga”. Todavía es una locura para mí que Olivia consiguiese salir con tres chicos, Taylor, el Belga, y ahora Ben, y no fuera tan lejos con cualquiera de ellos. Creo que parte del motivo por lo que terminé las cosas con Jason es que temía que si alguna vez desabrochaba con éxito mi sujetador, tendríamos que seguir adelante. No es que piense que tengo que dormir con la persona que estás viendo, sólo parece el tipo de dificultad, después de un tiempo, para explicar porqué no lo haces. Especialmente si realmente no sabes el motivo.
—Estas gravemente trastornada —digo a Olivia.
—Dios, estoy como que suspendiendo —dice—. Dame un respiro.
—Es el primer día de colegio —señalo—. Todavía no estás suspendiendo. Somos buenas estudiantes. —Lo somos, es verdad. Realmente no tengo una asignatura, estoy bien al igual que Harry y Lauren, quienes son increíbles con la ciencia, o Charlie, quien es un estudiante estrella de historia. Parecer venir y hacer preguntas a mi padre sobre las guerras que nunca he escuchado. Así que ella es como es. Pero mi GPA es muy bueno.
—Lo eres —dice Olivia—. Ni siquiera sé porque estoy en cálculo. Debi haber tomado estadísticas como hace un humano cuerdo.
Subimos a la mesa donde Justin y Ben estaban sentado con Jake. Tres deellos estaban muy cerca, aunque Ben es más una reciente adición. En realidad no se unió a nuestro grupo hasta el segundo año. Charlie hizo lo posible para mantenerlo muy alejado, pero él y Justin llegaron a ser supercercanos. Si me preguntas, Ben es ahora un auténtico hombre de pie. Charlie le da un tiempo difícil sobre ser un friki porque no surfea como Justin y Jake. Sospechaba que algo ocurriría en este verano, y no sospechaba que Olivia y Ben estuvieran juntos, pero el juego todavía es divertido. Siempre vi a Ben como uno de esos chicos que terminaría como un escritor viviendo en Nueva York, sentado en los cafés bebiendo café negro y siendo dueño de viejos ordenadores portátiles de Moleskine. Olivia bebe té Chai helado con leche y es dueña de un portafolio de Louis Vuitton con la palabra MIAMI deslumbrando en el frente. Así que puedo ver la desconexión ahí.Tiramos las mochilas cerca de ellos, y veo a Charlie; cuero marrón, gastado y clásico, totalmente su estilo.
—¿Ella está dentro? —Asiento hacia Justin. Casual, cool. Mi corazón no está latiendo a tres millones de millas por minuto porque vamos a ir a una cita esta noche.
—Si. —Inclina la cabeza a un lado y entrecierra los ojos hacia mi. Desde esta mañana todo lo que hace parece ser coquetear—. ¿Cómo estás? —pregunta, como si fuera la pregunta más importante en el mundo, como si estuviera preguntándome cómo desactivar una bomba nuclear. Me encojo de hombros, y él coge su sándwich, ofreciéndolo—. ¿Quieres un bocado? —Pavo y mayonesa. Sin tomate. Esta comiendo la misma cosa de la cafetería de la escuela desde que estábamos en primer año.