Like That «magcon».

38. Finales/Inicios

G I L I N S K Y.

Estaba bastante enojado en estos momentos, apretaba los puños para tragarme todas mis palabras e incluso podía ver cómo se saltaba mi vena de que estaba a punto de explotar de tanto enojo, no había soportado la manera en que Emily había tratado a Ally, porque no fue hasta que Rosie me dijo todo lo que había pasado o lo que le había contado que Emily le había hecho, tenía ganas de correr a abrazar a Ally pero no era el momento.
Después del show que hubo por culpa de Emily nos tuvimos que ir en carros diferentes así que J pidió un Uber y nos fuimos a casa, todo estaba bastante silencioso y era mejor, quería gritarle de todo a Emily pero decidí callar hasta que llegamos a casa y la puerta de ella se cerró.

G amor! —Dijo con una voz como si fuera inocente.

¿Cómo se te ocurre? —Voltee a verla bastante enojado.

El qué? —Hizo como si no estuviera enterada de que habláramos.

Decirle todo eso a Ally, esta vez te pasaste Emily y por mucho, hay un límite para todo y tú lo pasaste —Pase la mano por mi cabello y me senté en un sillón.

Es que estaba demasiado enojada se siente el centro de atención y —La interrumpí antes de que siguiera diciendo más sobre ella.

La que quiere ser el centro de atención eres tú —Grite y note como J bajo las escaleras rápido— ya no te quiero ver Emily de verdad se acabo.

¿Perdón? —Se rió incrédula a lo que había dicho.

Que ya no quiero estar contigo, no quiero estar con una persona que hace sentir mal a otra, que se quiere sentir superior y que hiere con las palabras, cuando te conocí eras increíble Emily pero ya veo que todo en ti es falso —Baje la mirada.

G creo que es suficiente —Se metió J s la conversación tratando de calmar esto.

Tú que te metes —Le grito Emily— y sabes que G vete a la mierda —Me mostró su dedo de amor y salió azotando la puerta.

¿Estás bien? —J puso su mano en mi hombro.

Si hermano —Asentí suspirando— era lo mejor, comenzaba a mostrar su verdadero yo y empezaba a molestarme.

G yo no quiero hacer esto más difícil pero me he enterado por ahí que a Ally le ha llegado un mensaje diciéndole que te pregunte a ti y a Sammy quién es ... —Lo interrumpí.

Ella ya no está a tema J y si le llego que lo ignore pero de mí no va a salir esa historia —Me levante de la silla donde estaba y subí las escaleras para después encerrarme en la habitación.

T A Y L O R.

Ya habían pasado 2 días desde lo que había pasado con Rosie en Six Flags y no atendía a mis llamadas, entendía que ella no quisiera saber nada de mi me había comportado como un completo idiota y eso me había pasado por escuchar a Carter, si yo de verdad quería Rosie no debía de haber dudado de lo que ella sentía por mí y mucho menos lo que había hecho por estar conmigo, dejar a Alex, dejar Miami, a su madre y yo metiendo la pata una vez más; quería solucionar las cosas pero tampoco sabía cuantos días de espacio debería darle o algo parecido, así que me decidí comprar un oso que s penas entraba en mi carro el cual asegure al oso con el cinturón de seguridad y unas rosas que puse en la parte trasera, subí al auto y maneje hasta casa de los Grier que era donde ella se estaba quedando, las cosas estaban un poco tensas nadie sabía nada de Sammy y mucho menos de Stassie, Ally se había desaparecido de la redes sociales y encerrado en su casa, G había terminado con Emily lo cual era lo mejor.
Después del corto camino de mi casa a casa de los Grier baje del auto con todas mis cosas y camine hasta la entrada donde senté al oso para poder tocar el timbre, después de unos minuto Ally apareció en la puerta parecía que apenas se levantaba, traía unos pans de dormir y una sudadera de la mercancía de Nash.

Hola Taylor —Dijo con su voz algo ronca lo cual respondía a mis suposiciones, apenas se levantaba— pasa —Se hizo a un lado para que entrara.

Hola Ally —Salude con la mano y al pasar le di un beso en la mejilla, camine con el oso hasta la sala y lo senté en el sillón.

Vienes a buscar a Rosie? —Me miro mientras se hacía un moño con su cabello.

Si —Asentí— no sabía si darle más tiempo o si ya debería de haber venido antes, sé que lo arruine todo porque seguro sabes lo que pasó, pero de verdad me arrepiento y quiero solucionar las cosas —Dije algo nervioso.

Tranquilo lo sé, Rosie a veces es difícil de roer y a veces se pone dura a la hora de disculpas pues cuando se enoja se enoja, pero sé que te escuchará así que relájate y explícale —Hizo una mueca— deja subo a decirle que estas aquí no tardó.

Ally subió las escaleras a prisa y el salón de estar se quedó en completo silencio lo cual hizo que un escalofrío recorriera mi cuerpo daba miedo, después de unos minutos de espera se escuchó en las escaleras unos susurros y después a Rosie bajando las escaleras con cierta cara de molestia, cuando llegó hasta mi me dispuse a besar su mejilla pero ella se alejó.

Te he traído este oso y estas flores —La mire con una mueca enseñándole ambos regalos.

¿Por qué? Porque me interesa tu dinero y por eso has creído que comprándome cosas es que yo te perdonaría —Se cruzó de brazos.

Yo... Yo —Baje la mirada— no lo pienso así Rosie... Me dejé llevar por un estupido comentario y sé que hice mal, que incluso puede ser demasiado tarde pero de verdad lo siento, no vengo con la idea de que me perdones o que las cosas vuelvan a ser como antes, pero si quería venir a disculparme por mi actitud idiota.

Me heriste Taylor —Suspire y la mire de reojo— tu comentario me hirió demasiado, jamás creí que podrías pensar así de mi.

Lo sé y es que... Me había comprado la mansión, justo tú habías cortado con Alex y esa persona hizo aquel comentario y ahora sé que fue una completa idiotes hacerle caso.

Lo fue pero al final lo hecho, hecho está Taylor y no pasa nada te disculpo —Me miro y entonces la mire.

Pero las cosa no volverán a ser como antes ¿cierto? —Se encogió de hombros— Rosie de verdad me gustas, me tienes hecho un pendejo de verdad, pienso las 24 horas del día en ti, todo el tiempo quisiera estar contigo, los días que te di se me han hecho un infierno.

Taylor.. —La interrumpí antes de que ella pudiera decir otra cosa.

Te quiero y no lo digo porque quiera salir de esta, lo digo porque te quiero de verdad lo digo por qué quiero estar con... —Antes de que pudiera terminar la frase Rosie ya tenía sus labios sobre los míos y no pude evitar sonreír como el tonto enamorado que estaba ahora.