Un nuevo comienzo.

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Yoongi ya estaba en su apartamento, se encontraba sentado sobre su cama restregando su gris cabello contra una toalla, mientras miraba la ropa húmeda sobre la estufa secarse.

Una vez que su cabello dejo de estilar, se dirigió a la cocina en busca de algo con que callar su estómago, pues la larga caminata a casa lo había dejado hambriento.

Ya en la mesa dispuesto a disfrutar de su emparedado, observó la foto de su madre, una encantadora mujer de amplia sonrisa y pálida tez como la nieve que se encontraba en la mesa de centro, generando que éste se sumiese en sus pensamientos ¿Realmente quería pasar el resto de su juventud haciendo esto? ¿Estudiando algo que no le interesaba? ¿Dejando de lado lo que realmente amaba? ¿Defendiéndose a golpes de todo aquel que le llamase marica y solo siendo feliz dentro de su imaginación?

<<¿Qué pasa contigo Yoongi? Antes tenias mas cojones... - se dijo a si mismo mientras apoyaba el rostro sobre sus manos.

Decidió ir a dormir, pues había perdido el apetito, cada vez que pensaba en su vida su estómago se contraía y dolía.

...

De un lado para otro corría Park Jimin preparando la apertura de la pastelería, quería que todo estuviese perfecto, pues la había mantenido cerrada por un largo tiempo.

- Uff al fin creo que todo esta listo! - exclamó alegre mientras frotaba sus manos.

Salió por la puerta delantera de la tienda con una pizzarra cubierta por una enorme cantidad de pasteles escritos a tiza de diferentes colores, la dejo en la entrada y se agacho con una en la mano de color verde para escribir en la parte inferior de la misma una H y una J.

- Todo listo - dijo mirando al cielo - he cumplido - terminó diciendo con algo de tristeza en el rostro.

La tienda lucía reluciente, llena de luz, el mostrador estaba decorado por una enorme cantidad de pasteles que había horneado el menor durante toda la noche y el aroma que llenaba el lugar mataría a cualquiera de un coma diabético.

Este era su pequeño trozo de cielo, su esperanza y estaba seguro que no hubiese podido lograr nada de esto sin él.

...

Yoongi regresaba de la facultad y por alguna razón decidió pasar por la misma calle de la noche anterior, tal vez de pura curiosidad ¿Como se vería la pastelería abierta? ¿Qué clase de pasteles tendrían?¿ El joven con quien choco ayer trabajaría allí? Si, muchas preguntas llenaron su mente, así era Min yoongi un joven de pocas palabras pero interminables monólogos internos.

Una vez fuera de la tienda quedo asombrado, era bellísima, parecía estar hecha nada más que para darle un cierre perfecto a la hermosa calle.

Miró hacia el interior y allí estaba el pequeño y delgado chico de ayer, sentado sobre un banquito llorando...

<<¿Qué es lo que te hace llorar?>> se preguntó Yoongi mientras se alejaba de la ventana y se disponía a continuar su ruta a casa.

Let him go /  YoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora