A Solo Una Mesa De Distancia

Capítulo 2

*Narra Sebastián*
-Chicos la próxima semana deberán traer una exposición de la historia de América, juntense en parejas - Dijo la profesora anotandolo en la pizarra.
-Hey! Benjamin, ¿hagamos el trabajo juntos? - Lo llame desde mi puesto.
-Ya po - Dijo caminando hacia mi.
- ¿Vamos a mi casa después de clases? - Le dije entusiasmado.

Vi como se ponia serio y me respondió
-Esta bien - Lo noté un poco nervioso, a decir verdad, yo también lo estaba y no se por qué.

*Narra Benjamín *

Sebastián ha sido un chico super atento y amable conmigo estos 3 meses que llevamos siendo amigos, y sinceramente me atrajo desde el primer segundo que se cruzaron nuestros ojos.
Yo nunca he tenido problemas con mi orientación sexual, pero en un colegio nuevo y con nuevas personas es difícil expresarse y mas aun con un chico tan guapo delante mio.

Él tenía los ojos celestes y el pelo rubio, era bastante alto y delgado, parecía un chico modelo.

Sera dificil ir a su casa sin caer en las tentaciones, pero mejor me concentro en el trabajo

Al salir de clases me dirijo con el al metro para mi suerte estaba extrañamente vacio, nos subimos y me afirme en la baranda

-Bueno.. - No sabia que decir, el se estaba acercando con una cara extraña. No podia soportar esto.
Me acerque mas a el y le di un beso

*Narra Sebastián*
Cuando nos subimos vi que Benjamím tenia un pircing en la oreja.
Trato de acercarme a verlo y de pronto..
Senti sus labios en los mios, eran suaves y calidos, no quise apartarme, me estaba gustando..

*Narra Benjamín *
Me separe de el porque se abrieron las puertas
Me sentía incomodo

Al llegar a su casa apareció una mujer alta, ojos verdes y bastante madura y con algunas canas que se disimulaban con lo rubio de su pelo. Era igual a Sebastián pero con ojos verdes
--Hola, tu debes ser Benjamín, yo soy Rocío, mamá de este loquillo-. Me preguntó con una voz muy agradable.
-Hola, si soy Benjamín, un gusto conocerla.
-Igualmente, Sebita me ha contado mucho de ti, bueno... los dejo para que hagan su trabajo-. Se fue y nos dejó solos.
-Uyy Sebita- Lo moleste con tono de burla una vez que se fué su mamá.
-Ja ja  si muy gracioso eh? - Me dió un pequeño golpe en la cabeza -Ven sigueme- Me dijo Sebastián con una sonrisa en su rostro, fuimos a su cuarto. Estaba en el atico, se veía calido y acogedor

El dejo sus cosas en el escritorio y se saco la camisa...
<Creo que me estoy sonrojando..>
Aparte la vista y mire sus videojuegos, tenia muchísimos, figuritas de star wars y el señor de los anillos, posters de Pulp Fiction y Volver al Futuro. Era un cinéfilo y friki sin duda alguna. Quien lo diría de un chico tan guapo.

Sentí unos brazos rodeando mi cintura, me di vuelta, mire sus ojos y me besó otra vez. Me puse muy nervioso y no quería que siguiera. Me aparté como pude y puse mis manos en sus hombros para hacerlo reaccionar.

-Sebastían, esto no está bien...- Lo miré directamente a los ojos.
-Benjamín, me tienes loco, nunca pensé que me atraería un chico, pero tu pusiste mi mundo dado vuelta-. Me dijo con una cara de cachorrito regañado. Yo no quería que esto ocurriera tan rapido, lo conocía hace solo 3 meses y no quería sufrir otra vez por un heterocurioso y mucho menos por satisfacer sus fantasías, por mucho que me gustase.
- No quiero ir tan rapido Sebastían, ni siquiera sabes que mierda te gusta y no quiero que juegues conmigo-. Lo miré muy serio, casi enojado, pero no quería ser duro con el, era muy precioso como para rechazarlo así

-Está bien, pero ya caeras en mis encantos-. Me reí y rodee los ojos.

Pasamos toda la tarde estudiando e investigando sobre el condenado trabajo de historia. Yo necesitaba descansar así que me paré del escritorio y fui a recostarme a la cama de Sebastián.
Solo descansaré unos minutos...

*Narra Sebastián*
-Benja despierta- Le dije a Benjamín que estaba acostado en mi cama .

-Ummm- Dijo desperesandose, y abriendo sus ojos pardos, <Esos ojos que me tienen atrapado...>, sentándose en la cama. -Buenos.. Días?- Dijo mirando a su alrededor.

-Buenos Días- Le dije riendome al lado de el. -¿Como amaneciste?- Le pregunté.
- ¿Supongo que bien? ¿ Mi celular?- Se levantó nervioso buscando su celular.

*Narra Benjamin*

Esto no podía estar pasando... hace años no dormía con un chico y de pronto amanezco abrazado a uno... y no es cualquier chico, era Sebastian. Mierda, mierda, mierda!

Me puse muy nervioso al darme cuenta que el grandote de ojos celestes me estaba mirando y me dispuse a buscar mi celular, mi madre debía estar preocupadisima.

Cuando lo encontré tenia 20 llamadas perdidas y miles mensajes de whatsapp.
Esta señora me va a matar cuando llegue a casa.

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Son las 2:30 am y yo aqui escribiendo esto xD muy mal Alme

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Aio ❤