En pequeñas piezas (EN EDICIÓN)

Tragedia.

Al día siguiente él no llamo, y yo tampoco lo busque. Pensaba olvidarme de él por unos días porque esa era una relación toxica.

Pasaron los meses y no supe nada de él hasta que salí con Joan a distraerme un poco. Estábamos platicando de cosas sin importancia cuando de la nada vi a David caminando y Joan también lo vio.

-Miren a quien me encuentro, a este idiota. Dijo David.

-¿Qué quieres? Dijo Joan.

-Vengo a darte la golpiza de tu vida por haber engañado a Mia con otra, ¿Cómo pudiste hacerle eso? Dijo David.

-Ah sí, y ¿tú qué? Tú la has lastimado más que yo, sólo la usas para tener la atención que te falta en tu casa. Dijo Joan. Se veía enojado.

-Cállate niño, tú no me conoces. Anda, golpéame.

-Paren. Dije.

-Aparte Mia. Podría hacerte daño. Dijo David.

-Déjame decirte lo que este idiota le hizo a mi casa. Lanzo huevos en la noche. Dijo David.

-¿Y qué? Lo haré las veces que quiera para que limpies gato. Dijo Joan.

-Paren. Dije.

-No Mia.

Joan llamo a un amigo y el me detenía, ya no podía hacer nada.

Comenzaron a golpearse, David estaba lastimando a Joan y yo no podía hacer nada. Creí que ganaría cuando lo vi en el suelo, pero luego se levantó y no sé qué le paso. Parecía otro. Comenzó a golpear a David tan fuerte no sabía qué hacer, tomo un bat y le golpeo todo el cuerpo, vi cómo le lanzaba patadas a mi David mientras yo sólo gritaba que lo dejará en paz. Llorando de impotencia golpee al chico que me sostenía y sólo podía observar a David en el suelo, su cabeza había golpeado con el pavimento y estaba inconsciente.

-Lo mataste Joan. Aléjate.

-Mia lo siento.

-¡NO ME TOQUES! Lárgate antes de que llame a la policía.