La hermosa navegante de cabello naranja no dejaba de rondar por mi mente una y otra vez, su sonrisa, sus ojos, su actitud, no se desde cuando empezó mi corazón a sentir esto por ella lo que estoy sintiendo, pero yo sabía que nunca iba a llegar a quererme.
De repente ella apareció por la puerta de la cocina con su sonrisa que a mi me hacía callar...
-Sanji-kun, prepara algo delicioso de cenar por favor.
Sanji le contestó como siempre, y eso me hacía sentir raro, no se porque pero me sentía incómodo al que a ella le hablará a el así y a mi no...
Cuando Sanji termino la comida y se la entrego a Nami, yo intente quitarle algo para que me hiciera caso, pero Sanji pateo mi brazo para impedir eso y me obligó a disculparme.
Cuando terminamos de cenar ella salio a ver las estrellas, por supuesto yo la seguí para hablar con ella y poder contemplar su rostro bajo la enorme luna que proporcionaba esa noche, a la vez que cerré la puerta para hablar, ella se volteo y preguntó...
-Luffy,¿Por qué has estado actuando tan extraño últimamente?
A la vez que ella volteó yo seguí otra dirección y ella me agarró de la espalda forzando me a voltearme y yo con la cara sonrojada y llena de sudor digo...
-No estarás imaginando cosas... Será por la luna llena...- Digo mirando hacia otro lado fingiendo no saber nada.
-Nunca aprenderás a mentir, tu cara te delata un cien por ciento - dice poniendo cara de ironía -Dime que es lo que en verdad haces... - Dice amenazando me con el puño.
-Bueno yo... en verdad no se si podré decirte ya que tu eres... ya sabes... - Me suelta se relaja y se sienta y yo me siento, junto a ella.
-Ven puedes decírmelo... No importa que sea lo que quieras decir... yo lo entenderé - Dice con su encantadora sonrisa.
-Bueno la verdad es que llevo escondiendo esto durante muchísimo tiempo y... No se como lo tomarás... - Procedo a darle un papel muy arrugado y viejo sacado de mi sombrero, ella lo toma con amabilidad y procede a leerlo.
Veo como sus mejillas se ponen rojas como tomates al instante y a la vez yo volteo la vista también sonrojado...
<<Maldito amor prohibido y los sentimientos que no me dejan decirlo, aunque lo sienta desde lo más profundo de mi ser, yo lo callaré aunque mis lágrimas griten que confiese, aún así lo callaré...>>
Las lágrimas comienzan a caer lenta y gentilmente de su rostro, y ella pregunta...
-¿Desde cuándo escondes esto?... - Pregunta con la boca tapada, apenas se le entiende debido al llanto que esta por venir.
Con algo de nervios respondí...
-Desde que tengo memoria... - Respondo al instante... Y ella continúa leyendo con la cara llena lágrimas... ¿Por qué será...?
<<Aún si yo me confesase, tengo miedo... Miedo de que si me rechazas abandones este pobre corazón arrepentido, miedo de que te alejes de mi, es por eso que yo se que no te merezco y callo este amor, es la mejor forma de no cambiar el mundo para los dos...>>
-Luffy... - Sin aviso alguno, y por sorpresa, ella se lanza hacia mi y me abraza, algo que yo nunca hubiera esperado de su parte, algo muy raro en ella - Si esto es lo que en verdad sientes por mi yo acepto tus sentimientos y los tomo con todo mi cariño.
Mientras dice eso con la cara llena de lágrimas y roja me mira fijamente y digo...
-Nami... Te suplico que... No me mientas... Sabes que eso no me gu...
Interrumpe mis palabras con un beso.. Un beso que me deja impactado y, yo seguido la abrazo con todas mis fuerzas siguiendo el beso, acaricio su cabello largo y sedoso, no puedo creer que esto este pasando de verdad... Este es el momento más feliz de toda mi vida.
Para por un momento y, me mira a los ojos...
-Idiota... sabes que aunque todo este mal serás el único en quien confíe y te acompañaré por siempre aunque me cueste la vida, gracias por todo lo haz hecho por mi, gracias por todos los sacrificios que haz hecho por mi, por todo eso y más, te amo...
Al final se recarga en mi hombro con alguna que otra lágrima en sus ojos... Como si hubiese estado esperando esas palabras... Como si ella también se estuviese callando sus sentimientos... Y todo para esperar esto momento, por todo eso y más, estoy feliz. Le tomo de la mano mientras miramos la enorme luna de esa noche y los dos nos quedamos dormidos bajo las estrellas.