Margaritas rotas

Capítulo 1 -¿Tú?

Es un día cualquiera, despierto a las 6:00 am como usualmente y oigo a lo lejos las palabras de mi madre:
-¡Ya apúrate ya se va a ir tu padre!
Desde que tengo memoria parece que esas son sus palabras favoritas, por mi que se vaya al fin ni tengo ganas de ir a la escuela
-Ya mamá no seas tan dramática- dije con un tono algo adormilado.
Salgo de mi casa y me encamino al coche donde me recibe mi padre con su música de los Beatles. Es un poco curioso que siga poniendo esa música, solo la pone en ocaciones especiales o cuando se siente nostálgico. Esa música la ponía cuando apenas era una bebé, básicamente crecí con ella y eso explica el porque de niña nunca me podía sacar esas melodías de mi cabeza y mis amigos pensaban que estaba loca. No conocían la buena música
-¿Lista?- me dice entusiasmado sin razón alguna. Creo que le da un poco de tristeza que ya no este a su lado, pero son cosas de la vida, tengo que crecer.
-Si- contesto.No quería hacer mucha platica, sabia que si seguía hablando con él me daría un speech de como he crecido y me haría recordar mi infancia y al final del camino los dos lloraríamos.
Como no quería escucharlo me apresuro y me pongo mis audífonos y pongo en el reproductor mi canción favorita para comenzar las mañanas en especial los Lunes, "How you remind me". Esa canción tiene un gran significado para mi, me recuerda a un crush que tenía en secundaria.
Pasaron varios minutos y varias canciones hasta que llegue a mi escuela.Por fuera era como otra escuela cualquiera, o eso veía mi padre, to la veía como una carcel. Siempre con sus estúpidas reglas. Por fuera se encuentra un cartel que dice <<bienvenidos>> lo cual se me hace una mamada. Abro la puerta del coche y me despido de mi padre ma dandole un beso. Al pisar la acera agarro mi mochila y pienso <<otro año más>>.Entro con mi cara de nadie me hable y voy a mi destino, la biblioteca, me la paso todo el día ahí, es como un santuario para antisociales como yo. No soy tan antisocial, de hecho mi novio es uno de los populares de la escuela, pero hay veces donde no quiero saber nada del mundo. Solo quiero desaparecer.
Recorro los pasillos buscando un nuevo libro que leer ya que me da flojera estudiar y siempre me han emocionado leer nuevos libros, en especial los de amor, así a veces puedo sorprender a mi novio y el nunca sabe de donde lo saqué;me encuentro con uno que llamó mi atención. En la portada se veía una margarita y las letras estaban un poco borrosas pero por alguna razón no pude aguantar mis ganas.
Estiro mi mano e intento agarrarlo, pero alguien lo agarró al mismo tiempo que yo, volteé mi cabeza para ver quien lo quería y para mi sorpresa era Cristian, el chico de doceavo grado que me conoce desde pequeña gracias a mi madre. La verdad nunca le hice caso, el era demasiado mamon para mi. Solo nos veíamos en reuniones familiares o cuando su hermana, que era mi mejor amiga, cumplía años.
Él me volteo a ver y los dos dijimos al unísono:
-Tú?
Presurosa solté el libro y se notaba en mi cara que me sorprendía verlo despues de tantos años.
-¿Eres tu, Miranda? ¿La vieja Miranda?-me dijo en un tono algo curioso y burlón.
-Si soy yo Cristian, pensé que a esta hora de la mañana nadie estaba aquí-dije algo sarcástica, pero era verdad. A esta hora que hace aquí y en especial él.
-Pues pensaste mal- me dijo con astucia
-Si ya lo noté- lo dije mientras rodaba mis ojos
-Y ¿me extrañabas?- me dice , tocó mi punto débil, pensé que ya lo había superado, que se había olvidado de mi en primer lugar, pero al parecer no.
-¿Yo? ¿Que te hace pensar eso?- la verdad teníamos un pasado creo. Supongo que él siempre supo que me gustaba y yo era demasiado obvia para que no lo hiciera.
-Hmmm digamos que te gustaba hace.......2 años- lo dijo como si supiera de mi, y si lo hacia
-Eso ya pasó sabes, ya tengo novio-quise disimular. En esos momentos dude un poco de mi relación con Toby, pero pensé bien y no podía dejar de amarlo.
-¡Que bien! Así ya no tendrás un crush imposible conmigo-me dijo junto con una sonrisa
-¿imposible? Por favor te hablo más que cualquiera de tus ex novias- yo tenia la razón. Yo siempre era odiada y envidiada por hablare y por saber todo de él.
-Eso es cierto, pero eres muy....muy...-dijo tartamudeando- santa
-Perdón?. No lo podía creer, no solo porque no me acostara con Toby o con él me convertía en santa.
- No tienes porque hacerte la chica mala cada vez que me ves
-Sabes que yo no soy así y ya me hartó hablar contigo, pierdo mi tiempo.
Salí de la biblioteca y fui en busca de mi mejor amiga Julianne.
Cuando iba de camino a verla me acordé de ese libro que quería hasta que llegó Cristian, pero no me regresé por el, no quería encontrarme con Cristian otra vez y quizá él ya tenga el libro en sus manos.