Sobreprotector|Teen Wolf|[Liam Dunbar] {PremiosNSD}

02

—Ya vas a poder salir, Lilith, no te desesperes—habló Scott entrando a la habitación.

Habían pasado algunos días desde que me habían internado y hoy iba a salir, Scott me dijo que mañana después de la escuela iban a hacer una fiesta en la casa del lago de la abuela de Lydia y que Scott me iba a llevar y aunque se que no debería hacer nada que me pueda lastimar el brazo estaba aburrida de estar todo el día acostada haciendo nada, se que a muchos les gusta no hacer nada pero después de no hacer nada por mucho tiempo te dan ganas de tirarte en paracaídas con tal de hacer algo.

Salimos del hospital después de que mamá llenara algunos documentos y firmara algunas cosas, Scott caminaba a mi lado poniendo su mano frente a mí como si fuese a colapsar en cualquier momento.

—Scott, no voy a
colapsar en cualquier momento, no necesitas seguirme para asegurarte—le dije.

—Solo quiero estar seguro, ¿de acuerdo?

^•^

—¿Scott?—lo llamé, estábamos en el carro de Stiles, hoy iba a volver a la escuela, tenía que tomarme algunos analgésicos cada hora para que no me doliera el brazo, así que se puede decir que estaré drogada todo el día.

—Sí, Lilith—respondió.

—Me preguntaba si podía dar lacrosse hoy—hablé bajando mi tono de voz a medida que hablaba—, se supone que hoy iba a ser chicas contra chicos y no me quiero perder el juego—añadí antes de que pudiera decir que no.

—Ni hablar, claro que no, ni loco, que ni se te ocurra, no jugarás—negó varias veces.

—Scott porfavor—rogué—, solo jugaré unos cuantos minutos, porfavor.

—No, es mi última decisión.

—Pero Scott, llevo varias semanas esperando esta clase para poder-

—No.

—¡Scott!—grité.

—Esta bien, bien, hay que calmarnos, ¿Qué tal si juega solamente 10 minutos, puedes pedirle al entrenador que tome el tiempo?

—Sí—respondí.

—Está bien, pero no te esfuerces mucho, no quiero que se te abran los puntos.

—Está bien—accedí mientras Stiles se estacionaba en la escuela.

—Si las pastillas te hacen sentir mareada solo pide que te manden a casa, ¿De acuerdo?—habló Scott abriendo su puerta para dejarme pasar.

—Si señor Scott—dije llevando mi mano a mi frente como si estuviera en alguna fuerza.

—Está bien, marchen—ordenó siguiéndome el juego—. Uno, dos. Uno, dos. Uno—sus palabras quedaron en el aire cuando me tropecé con la acera y caí sobre unos arbustos.

Scott y Stiles corrieron hacía mí, cada uno tomándome de un lado para alzarme.

—¡Sigamos!—exclamé, sabía que Scott iba a dudar de su decisión de dejarme venir. Comencé a avanzar pero el brazo de Scott se interpuso en mi camino.

—Creo que es mejor que vuelvas a casa—dijo.

—Solo me mareé un poco, no es nada—le quité importancia.

Scott y Stiles caminaron junto a mí como si fueran mis guardaespaldas o algo por el estilo.

Frente a la puerta de mi clase pude ver a Mason y a Liam.