~Historia~

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Estábamos vistiendonos, era 14 de febrero en la mañana, ambos nos estábamos preparando para ir al trabajo, yo estaba en la cocina haciendo el desayuno, mientras lo servía, sonó el teléfono, así que fui a la habitación a tomarlo, al terminar la llamada fui al closet a ver que me pondría y en ese justo instante salias del baño. Entonces salí del closet para que no me vieras y me quede observándote de manera sigilosa en la habitación. Mientras tanto tu te desnudaste y empezaste untarte tus cremas; me empecé a excitar con lo que veía, y no pude aguantar las ganas de cojer que tenía, así que mientras tú buscabas la ropa interior, yo me acerqué y me pegue a ti, tu te asombraste un poco, yo coloque mis manos manos sobre tu espalda, tu te erguiste, luego te di la vuelta y te besé.

Mientras nos besábamos tu me agarrabas el trasero, por un momento tomé una breve pausa y te dije: -Feliz San Valentin- entonces tu acentiste con la cabeza y me miraste fijamente con los ojos, mi corazón se aceleró, mi sudoración aumento, mientras mi mente seguía en ti, así que acerque mi boca a tu oreja y te dije te amo, tu me besaste y me quitaste la camisa y la camiseta que llevaba puesta. Luego me llevaste a la cama y me dijiste: -quiero que volvamos a los viejos tiempos- Y encendiste la televisión, yo te acaricie el pelo, te envolví en mi regazo, y fueron pasando las horas, así que ambos teniamos hambre porque no habíamos desayunado, así que peleando con nuestras almohadas, fuimos a la cocina, allá nos pusimos a jugar con la comida, ambos parecíamos 2 niños, al terminar fuimos a limpiar los platos, y mientras limpiábamos los platos, nos pusimos a jugar con la espuma, nos besamos, yo acaricié su rostro muy sutilmente y ella soltó leves gemidos de un placer que ambos deseábamos que fuera eterno.

Entonces ella me tomo de la mano y me haló, fuimos a la habitación y jugueteamos un poco entre los edredones, después de unos minutos de jugueteo intenso, ella miro el reloj, y marcaban las 4:30, ella me dijo salgamos, se para de la cama y fue al closet, yo la agarré de las muñecas y la pegué de la pared, ella me miró a los ojos y pude ver cómo la invadía la lujuria, fue algo tan intenso, ella acercó su cara a mi cuello y me hizo un leve roze, así que yo bese su lóbulo, mientras ella se excitaba, me recordé de momento que teníamos que salir, así que ambos nos pusimos ropa deportiva, unos tenis y salimos a correr.
Estábamos en el Mirador corriendo, cuando empezó a caer la tarde, encontramos un área verde y nos acostamos en la grama a descansar, duramos unos minutos hablando, mientras ella colocó su cabeza sobre mi pecho y nos pusimos a mirar el cielo fijamente, luego buscábamos formas en las nubes, eso provocó recordar aquellos momentos de nuestra relación cuando nos conocíamos. Ya caída la noche nos encontrábamos solos, y en un instante se fue la luz, se podían contemplar las estrellas, éramos iluminados por un hermoso cielo estrellado. Ella como si fuese una tigresa se subió sobre mi como si de capturar a su presa se tratase, yo la mire a los ojos y empecé a acariciar su pelo, ambos nos besamos, ella se fue desnudando lentamente, mientras yo me quitaba la camiseta, luego ella me quitó los pantalones y empezamos a coger en ese lugar, al terminar admiramos de nuevo el cielo estrellado que se podía ver debido al apagón que había en la ciudad y ambos pudimos observar como pasaba una estrella fugaz y ambos nos miramos y exclamamos al cielo amarnos eternamente.

FIN.

Mi 14 De FebreroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora