(PV Lucifer)
Eres tan torpe y lindo que me encantas, duermes abrazado a mí como si todo este tiempo de soledad nunca hubiera existido, se suponía que estaríamos siempre así, que nadie nos molestaría y al despertar siempre vería tu sonrisa.
Puede que ya no lo recuerdes, pero yo no podría olvidar mi primer día de vida.
--- Flashback-----
No se si estuve dormido, sólo estaba en una oscuridad muy profunda y escuché una voz, descubrí que tenía ojos y la luz comenzó a filtrase a través de ellos, formas y colores surgieron poco a poco hasta que una figura apareció frente a mí.
- ¡Hola! Me alegra que despertarás, y parece que estás bien.
Me miraste con emoción y sorpresa, tus ojos azules me hipnotizaron sin saber el motivo, tu sonrisa me dio la confianza para moverme y ver mi cuerpo.
- Eres el primer ser vivo que hago, ¿Cómo te sientes? ¿Puedes hablar?
- S...Si.- hablé por primera vez.
Me abrazaste emocionado y no entendía el porqué, pero sea lo que sea me gusto que lo hicieras.
Me tomaste de la mano y me mostraste el lugar, eras muy alto para mí y apenas llegaba hasta tus hombros, pero mis piernas te seguían y mi mano se aferró a la tuya para que no me soltaras. Me dijiste qué era cada cosa y nos detuvimos frente a lo que llamaste "agua" señalaste mi reflejo y por primera vez vi mi cara. Era joven pero mi cuerpo se parecía al tuyo incluso el cabello negro y las alas blancas, sonreíste divertido al ver que me comparaba contigo.
- No creo que debamos ser exactamente iguales, ¡Ah! ahora que lo pienso no tienes un nombre.- frunciste el ceño haciéndome reír.- ¡Ya sé! ¿Qué te parece Lucifer?
- Si.
Tenía un nombre, aunque no había nadie más aparte de nosotros, pero me hiciste sentirme especial y eso me bastaba.
----
Creaste a otros como yo, dijiste que aquellas con pechos serían mujeres y nosotros hombres, pero no me interesaba igual sólo me mirabas a mí con esa sonrisa tan perfecta, aunque hablabas con otros al verme te alegrabas, era especial para tí y eso me encantaba.
Los demás construyeron una gran ciudad, tener alas era una ventaja para todos y yo quise ayudarte a mejorar este mundo al que llamaste Tierra, usé lo que me enseñaste y creé a un pequeño animal, era tan lindo y torpe como tú aunque no hablaba sólo decía "miau" pero quería que lo vieras. Unas mujeres te hablaban de forma extraña y me molesté al ver que dejabas que te tomaran del brazo, algo en mí se estremeció y sentí algo extraño, pero cuando me viste las dejaste a un lado y me abrazaste haciéndome olvidar lo que sentí.
- ¡Que lindo!- me dijiste cuando te mostré a la criatura.- Es hermoso, debemos hacerle una pareja para que haya muchos más por aqui ¿cómo lo llamaremos?
- No sé
- Vamos Luci, es tuyo y debes darle un nombre, aunque yo no soy el más apropiado cuando tardé tanto en llamar a cada árbol por su nombre. ¿Qué tal si lo llamamos.............gato?
- Me gusta.- le dije sonriendo.
- Maestro ¿Qué le parece si las mujeres somos las que creemos seres nuevos?- dijo una de las chicas.
- Pero, los hombres también deberían ¿No?- dijiste.- Así sin importar la pareja puedan reproducirse.
- Entonces tú también tendrías hijos.- te dije.- ¿No somos nosotros creados sólo por tí? Que las mujeres se encarguen.
ESTÁS LEYENDO
Mi Angelito Inmortal
UmorismoMi nombre es Keima, Un chico me dijo que había muerto y ahora era un aprendiz de ángel guardián. No sé qué sentir ahora, pero creo que no me molesta. Lo que me intriga es que en mi primer día de trabajo un hombre me besó reclamandome como su pareja...