Sweet Attraction. [Attraction #2]

Capítulo 10: Visitas no deseadas.

Narra Carter.

La casa estaba demasiado silenciosa para mi gusto. Algo raro de ver un día de semana, más sabiendo que al día siguiente todos teníamos responsabilidades a las que atender. Así que, un silencio tan grande sólo quería decir una cosa. Visitas en la casa. No tenía la menor idea de quién podría ser, pero mis planes de tomar una comida rápida con Eleonor y llevarla a mi habitación donde podría dormir a su lado sin que nadie me impidiera abrazarla.

Sólo necesitaba un poco de sueño reparador. Había comenzado, una vez más, mi turno de rotación en el hospital luego de que me pidiera un tiempo para preparar unos exámenes y de que me autorizaran el cambio a la cuidad en la que estaban mis padres. Era un cambio grande, no conocía a los residentes con los que compartía tiempo, pero me habían recibido con los brazos abiertos y, la gran mayoría, con ganas de ayudarme a adaptarme.

—Tienes que contarme como te fue en tu primer día —Eleonor captó mi atención en cuanto me vio demasiado callado—. Seguramente estés cansado, pero quiero saber todo sobre tus compañeros y lo que te dijo tu tutor sobre trasladarte a esta ciudad.

—Tenemos toda la mañana, rubia. —Sonreí un poco contento de saber que me despertaría con ella a mi lado.

—De hecho, no sé si recuerdas, tengo que ir al instituto. Ya arreglé con Ryan para que me pase a buscar así puedes dormir más tiempo —Eleonor se encogió de hombros antes de pegarse aún más a mi lado—. Puede que no te guste, pero te necesito con toda la energía posible para que me soportes cuando vuelva de esas malditas clases.

—Allí estás —Lilly interrumpió mi intento de convencer a Eleonor que faltara a clases para pasar tiempo conmigo—. Mamá escuchó tu auto llegar y quiere que saludes a las visitas —La mirada de Lilly pasó a Eleonor, con una sonrisa forzada—. Creo que una estará gustosa de conocerte y la otra feliz de verte.

Parecía como si las personas que mi padre había invitado a cenar tuvieran que ver con Eleonor. Pero la mirada de la chica me dejaba en claro que no tenía idea de que estaba hablando mi hermana. Además de darse cuenta que las cosas no estaban bien con Lilly pese a que no entendiera el porqué. Lo cierto es que, cuando se trataba de mí, Lilly podía ser un jodido dolor de trasero, más si las cosas no terminaban de cuadrarle. Y saber que mi relación que Eleonor había sido complicada desde el principio, la hacía sentir reacia a todo lo que mi chica podía hacer.

—Vamos a ver que nos espera... —Le dije a Eleonor antes de tomarla de la mano y guiarla a la sala donde mamá llevaba las visitas.

—No deberíamos... —Eleonor intentó soltar su mano de mi agarre.

—Ni lo pienses, eres mi pareja, no hay nada de lo que debas esconderte —Sus mejillas se sonrojaron antes mi palabras, pero no lo negó. Lo que, definitivamente, era algo bueno—. Además, me presentaste a tus padres como un "nos estamos conociendo", no puedes retractarte ahora.

—Tienes razón, lo siento —Eleonor suspiró y me regaló una sonrisa—. Soy nueva en todo esto, espero me tengas paciencia.

—Toda la que necesites —Tomé su rostro entre mis manos para asegurarme de que lo estaba diciendo en serio—. Te quiero, rubia, tienes que saberlo.

Vi pasar la sorpresa en sus ojos, la alegría por las palabras que habían salido de mis labios y el miedo de asumirlas totalmente. Por mi parte, no eran las palabras que realmente quería utilizar, pero al menos era un comienzo. Más aún cuando vi que ella no salió corriendo sino que fijó aún más su mirada en la mía y susurró tan bajo que fue casi imperceptible.