Ser novio de Kim JongIn definitivamente era una lucha, eso pensaba KyungSoo mientras levantaba todas las prendas esparcidas por la habitación Mudarse con Kim JongIn también era una lucha. Con estas afirmaciones no decía que el haberse mudado con su novio fuera mala idea, a pesar del desorden DO KyungSoo amaba a su novio y vivir con él también tenía sus ventajas. Llevaban alrededor ocho meses viviendo juntos. KyungSoo había pensado que el verlo todos los días y convivir con él harían que todo se vuelva monótono, pero no, estaba muy equivocado, no podía negar que ambos habían creado una pequeña rutina; entre sus empleos, sus horarios y demás cosas, pero eso no hacía que el cariño se esfumara.Era así como se encontraba cumpliendo con la pequeña rutina de los viernes, limpiar la habitación, descansar y luego preparar una pequeña comida para recibir a su pequeño. Era solo un año los que los diferenciaban pero Kim JongIn era como un niño, juguetón, berrinchudo y dulce. A pesar de la pequeña diferencia su novio siempre reclamaba porque "KyungSoo eres mayor y debes cuidarme" agregándole unos bonitos pucheros y KyungSoo caía rendido olvidando que el moreno le hablado de manera informal.
Había estado tan clavado en sus pensamientos que no se dio cuenta de la presencia a sus espaldas. Tarareando una canción llevó las prendas sucias y limpias, girando sobre sus talones se topó con la presencia de su novio viéndolo en silenció. Dio un saltito de la impresión soltando un jadeo involuntario.
- ¡Dios! JongIn me has dado un gran susto. ¿Cuánto tiempo llevas ahí? -Preguntó. El moreno no contesto y solo se acercó a KyungSoo con una sonrisa y sin más estampó sus labios contra los del más bajo. KyungSoo hizo un ruido de sorpresa por dos simples razones.
La primera, porque no se esperó aquel beso y mucho menos la presencia del menor a esas horas, puesto que aún no había terminado su horario de trabajo.
La segunda, porque no se esperó ser manoseado bajo sus prendas por unas hábiles manos.
Pronto dejo de sentir los labios de su novio sobre los suyos y los sintió correr por su cuello haciéndolo jadear.
-¿J-JongIn? ¿Qué haces aquí tan temprano? -preguntó entre jadeos.
-Eso no importa ahora. Te deseo, Hyung-le susurró en el oído. Y KyungSoo se derritió en ese momento con las manos del moreno agarrado fuertemente a su cintura.
En un pestañeo el más bajo ya estaba sobre su espalda, tanto su pantalón como su bóxer habían desaparecido dejando la camisa desabotonada en su cuerpo, ahora bajo el moreno. Las manos de KyungSoo viajaron a la espalda aún vestida de su novio y apretó el agarre porque los besos, mordidas y succiones en sus pequeños botones rosas lo hacían delirar.
-JongIn, t-tu ropa está sobrando aquí -gimió con molestia. No tuvo que decirlo dos veces porque el moreno se deshizo de todas sus prendas y en menos de dos segundos ya estaba succionando sus pezones de nuevo. KyungSoo tenía la vista borrosa y de sus labios resbalaban suspiros y gemidos demasiado quedos.
-Te deseo, Hyung -le volvió a susurrar el moreno y KyungSoo asintió perdido en el éxtasis extremo. Era increíble que solo los besos y roces causaran una erección en él y todas esas reacciones.
Un gran alarido salió de sus labios y su vista se fijó en aquella imagen tan erótica, el moreno estaba succionando su intimidad con mucho ahínco. A KyungSoo se le fue el aire de los pulmones y la razón voló lejos junto a sus ropas probablemente. Hace tiempo que no se tocaban por el cansancio y otros motivos. KyungSoo tenía que admitirlo, lo había extrañado y mucho. Juntando toda la fuerza de voluntad que podía alejó al moreno de su pene, estirando su rostro para atrapar sus labios entre sus dientes, luego lo besó lento y sensual, tomándose su tiempo para bajar por la barbilla del menor. KyungSoo quería devolver todas las atenciones que recibió así que empujó al menor sobre su espalda y él se despojó de su camisa que aún seguía en su lugar. De manera lenta y sin juegos previos bajó hasta la marcada erección de su novio, se relamió los labios antes de succionar con dedicación creando sonidos demasiado obscenos para ambos. KyungSoo succionaba la erección del menor, sintiendo el líquido pre seminal en la lengua.
-Hyung -escuchó un jadeo y algo parecido a "joder" de los labios del menor. Alzó la mirada aún con la erección entre sus labios - ¡Dios! No me mires de esa manera. -lo ultimó que escuchó fue un gruñido antes de estar de nuevo sobre su espalda con el moreno acostado a horcajadas sobre su pelvis.
-JongIn, vamos. Yo también te necesito -le rogó con unos gemidos de por medio por la fricción de sus erecciones. El moreno se agachó hasta agarrar los labios del más bajo y bajar a su cuello, en ese punto justo bajo sus orejas.
-Yo te deseo dentro de mí, Hyung -le volvió a susurrar. KyungSoo trago saliva con dificultad y se excito de sobre manera. No era primera vez que hacían esto y KyungSoo estaba ansioso. El moreno se mordió el labio inferior cuando llevó la erección del mayor entre sus glúteos, y se encargó de torturar al mayor, subiendo y bajando haciendo una fricción exquisitamente enloquecedora.
-JongIn... -reclamó con gemido que más bien alcanzó a ser gruñido. El menor soltó una pequeña risa en su oído y detuvo sus movimientos para colocar la erección del más bajo en su entrada. KyungSoo suspiró y se tensó - ¿JongIn? ¿Qué haces? Debes prepara-
-Shhh... Sólo disfruta Hyung.
-Perooo... -extendió aquella palabra porque el moreno había introducido su erección de un solo golpe en su estrecha entrada. -Santa mierda.
-Vamos Hyung... -le dijo el menor y se movió. ¡Mierda! La sensación era exquisita. KyungSoo llevó sus manos a los glúteos de su novio y los separó para un mejor acceso.
-Dios, JongIn...
-Hmmh! H-hyung... más! -le dijo entre gemidos. Y claro que le dio más. Mientras más pasaba el tiempo, ellos se hundían más en el inevitable orgasmo.
-Más, más rápido... Hyung -KyungSoo obedeció moviendo sus caderas y chocando ruidosamente con los glúteos de JongIn. El mayor acunó el rostro de JongIn entre sus manos y lo beso húmedo y necesitado.
-Estoy cerca -le dijo sobre sus labios y miró mientras su caderas se movían en una sintonía perfecta. JongIn asintió y cerró sus ojos. -Mírame, JongIn -el menor obedeció y ambos llegaron al tan ansiado orgasmo en ese preciso momento. Tan perfecto, tan satisfechos. JongIn cayó rendido sobre el cuerpo del mayor.
- Te amo... -le dijo entre respiraciones dificultosas.
-También te amo, JongIn. -el menor se deslizo con cuidado y tomó a su pequeño Hyung entre sus brazos. Estaba cansado y quería dormir.
-¿Te he lastimado? -el moreno negó y se sonrojo. KyungSoo enarco una ceja. -Kim JongIn ¿Por qué hiciste eso?
- Yo... bueno antes de venir tenía muchas ganas de ti y me dieron el día libre. Pero yo bueno... creo que me preparé para ti... -KyungSoo lo observó antes de romper reírse muy fuerte.
-Yah! Hyung, no te rías yo lo necesitaba -KyungSoo dejó de reír y besó de manera tierna ese pequeño puchero en sus labios.
-Te amo...-le susurró. -También te extrañe.
KyungSoo se recostó en el pecho del menor. Al final la habitación quedó peor de lo que estaba y ellos, bueno, habían roto su pequeña rutina.
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Holaaa! Aquí! Practicando mi lemon ;-; que les pareció?Llevaba tiempo queriendo ukear al Nini xD Mihanhe kkkk xD(ㆁωㆁ)
Estaba escuchando "Lu" de nuestro ciervito xD naah! Disfruten.
Bien!! Hasta aqui. Gracias a quien se tome el tiempo de leer tal barbaridad como esta (つ∆⊂)
Nos leemos pronto
VicLeo~
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I Want You ~ {SooKai/KaiSoo}
FanfictionVivir con Kim JongIn defintivamente era un lucha... Y KyungSoo estaba cumpliendo la rutina que habían creado con JongIn. Pero quizá algo interesante pasará esta vez. Lo sé no soy buena para los resumenes! xD ×Pareja: SooKai ×Género: Smut, romance...