Caminaba por la calle para llegar a la estación del metro, mis prisas hacia la escuela eran demasiadas, sin embargo, deben saber que siempre cuanta más prisa tenemos es cuando nos es más fácil distraernos y eso me sucedió cuando vi su alocada cabellera púrpura, me detuve y pensé en acercarme, cargaba una guitarra en un estuche negro y tenía una sonrisa contagiosa, creí que solo sería uno de esos amores de tu vida que ves en las calles, un chico se acercó a él y ambos juntaron los puños caminando a mi dirección. Algo me aceleró el corazón.
Mientras se acercaban más me percaté de que su lóbulo izquierdo estaba perforado y llevaba una camisa con la bandera estadounidense, sus labios eran de un rosado pálido y cuando mordió el inferior me di cuenta de que debía darme la vuelta e irme.
Bajé las escaleras del subterráneo y corrí deslizando mi tarjeta cuando me di cuenta de que el vagón esperaba. Giré apenas la cara como esperando que me siguieran y algo en mi escaner visual me detuvo. ¡Cabello púrpura! Giré la vista al tren y las puertas comenzaban a cerrarse dándome apenas unos segundos, sin embargo me detuve y me giré sobre mis tobillos. Nunca había hecho algo así… lo extraño fue cuando él y otro chicos, ahora castaño de ojos oscuros corrían hacia mi, Dios, ahora estaba asustada. –¡Chica del cabello azul!- escuché que gritaba el moreno, su voz sonaba como si estuviese mormado, luego el otro, uno rubio delgado y de rasgos delicados alzó la mano. Quise echarme a correr pero mis pies parecían de cemento.
-¡Oye!- gritó el del cabello púrpura. Su voz era… exquisita.
-¿Sabes? Deberíamos dejar de gritar, está frente a nosotros.- susurró el mormado y yo miré al hombre a mi lado. –Hola Katy Perry…- fruncí el ceño confundida.
-Demi Lovato es la de las puntas azules.- oh, se referían a mi cabello.
Alcé una ceja y Él me dedicó media sonrisa, era una combinación de ternura y sensualidad. –Oye… tiraste esto mientras corrías por las escaleras.- sacó mi credencial de estudiante y yo reí tomándola.
-Por un segundo creí que te había parecido sexy.- su pálida piel apenas se tornó roja.
-Bueno…- agachó la mirada y el rubio gritó.
-¡Vio que la tiraste y corrió para dártela y conocerte!- ahora yo estaba ruborizada y todos nos miraban.
-Bueno, estudias en Swinburne ¿no?
Volví a fruncir el ceño y entrecerré los ojos. –Me encantan las chicas expresivas, cuando les gustas te comen con la mirada, cuando les desagradas te matan con la misma.- dijo el de los ojos oscuros entusiasta. –Debería callarme.
-¿Cómo lo saben? Oh… ¿La credencial?- negaron riendo. -¿Estudian ahí?- asintieron.
-Te hemos visto llevarle papeles al Profesor Lewis, Mike tiene un crush contigo.
-¡Luke!- gritaron los tres al unísono girándose a fulminar con la mirada a un segundo chico rubio.
El tren se detuvo detrás de mi y yo me giré nerviosa. –Debería irme.
-Nosotros también.- asintieron y caminé nerviosa para subir. –Bueno, solo por si querías saberlo… Yo soy Michael, pero obviamente me dice Mike… este es Calum, Ashton y Luke.- suspiré asintiendo.
-Summer…- me presenté.
-Lo vimos en la credencial.- mencionó el rubio de los gestos delicados.
-Oh bien. Entonces…
(…)