era bastante extraño todo, empezando porque cuando llegué a mi "sala de jefatura" no había ese típico asiento al fondo de la sala que te llamaba como "hola, si te sientas aquí estarás en la categoría de la emo del curso, bienvenida."
claro que no, en cambio habían esos horribles asientos de madera en los que te duele el trasero luego de estar menos de 5 minutos sentado.llegué y planeaba sentarme lejos de todos los "grupos" pero es que en ese salon nadie se conocía
extrañamente encontré a uno de mis ex compañeros ahí, el más alto y "pachonsito" de todos.
me senté por ahí con él y analicé a las personas a mi alrededor "dos jarcoritas y puros flaites, genial."
quién diría que esa jarcorita también me menospreció ese día por mi estuche de totoro.
luego ya nos conocimos y felizmente le caí bien por haberla hecho reír y hasta el día de hoy agradezco a mi mente por eso.
ESTÁS LEYENDO
psych0.
Non-Fictionno lo sé, sólo pasó que de un momento a otro no podía parar de dibujar.