11. Obliviate

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A la mañana siguiente me desperté con un ligero dolor punzante en mi brazo, lo mire de mala gana para encontrarme con un enorme moretón en forma de dedos.
-Maldito seas Ethan Northway - susurre mientras me levantaba.

Era todavía muy temprano, por lo tanto los chicos aún permanecían dormidos, me dirigí al baño y me di una rápida ducha mire mi reflejo en el espejo, con rabia mire mi brazo con el moretón, joder parece como si me hubieran secuestrado.
-¿Al? - escuche la voz a través de la puerta.
- ¿Que sucede Scorpius? - dije mientras comenzaba a vestirme.
-¿Qué haces levantado tan temprano? - dijo mientras daba un bostezo.
-¿Y tú? - dije desviando el tema.
-Me despertó el sonido de la ducha, ¿estás bien? - Dijo con preocupación.
-Claro ¿Por qué no debería estarlo? - dije con tono burlón - ¿Piensas que si me baño me siento mal?
Escuche una física detrás de la puerta.
-Al...
-Dime.
Silencio.
-¿Que sucede? - dije terminando de vestirme-¿Scorpius?

Salí del baño algo apresurado para encontrarme con Scorpius mirando la puerta con anhelo.

-Si querías ir al baño solo dilo - dije en broma.
Él sonrió débilmente y me miró fijamente. Tomo con fuerza mi brazo y bajo la manga, dejando ver el moretón que había hecho Northway
-¿Que te sucedió en el brazo Albus? - escupió con desprecio
Mire rápidamente mi brazo y trate de bajarlo, pero al parecer Scorpius era reacio a dejarme ir.

¡Justo ahora dan frutos sus entrenamientos de Quidditch!

-No es nada - dije nervioso - solo fue el borde de Northway, ayer me encontré con él, después del banquete.
Scorpius frunció el ceño y miro con odio la marca.

-¿Por qué no me lo has dicho? - dijo sin mirarme a la cara.

-¿Tenia qué? - dije despreocupado - No era nada para preocuparse, solo era Northway.
-¡Es de quinto Albus! - Dijo subiendo de tono su voz.
-Tranquilízate - dije suavemente - No importa que sea de quinto, no me quería ver para hacerme daño.
-¿A no? - dijo bajando aún más La manga de mi camisa y acercó mi brazo a la cara - ¡¿Entonces qué es esto?!

Frunció el ceño, ya tenía suficiente con tratar con el maldito de Northway y ahora tenía que tranquilizar a u Malfoy de mal humor.

-Ya, no te preocupes por esto Scorpius - dije conciliador - Gracias por preocuparte, pero no es necesario, se defenderme solo y estas equivocados si crees que las cosas se van a quedar así.

Mire a Scorpius y le di una sonrisa, el relajo la mirada y soltó lentamente mi brazo ¡Genial! Ahora no tenía una si no DOS marcas.

Miro con culpa me brazo done se estaba formando el nuevo moretón hecho por Scorpius, baje la manga de la camisa y le sonreí quitándole importancia.

-No te preocupes, yo hubiera reaccionado igual - dije mientras me colocaba la túnica - Iré al salón de Pociones y hare una poción contra los moretones

-¿Quieres que te acompañe? –dijo algo timido.

-No, vuelve a dormir –dije suavemente mientras le daba un ligero toque con mi mano en el hombro –no me demorare nada.

Salí de la habitación dirigiéndome rápidamente al salón de pociones. Al llegar a la puerta la abrí suavemente, viendo como una persona adentro se sobresaltaba y miraba rápidamente hacia mí.

-¿Qué haces aquí Potter? –Dijo confundido Northway.

Mierda, la última persona que quería encontrarme.

-Lo mismo te pregunto Northway –dije entrando con confianza.

-Tengo un permiso especial de la profesora Potter –dijo sacando un papelito –Algo que indudablemente también tendrás tú.

Solo cambiemos de rumboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora