Capítulo 16

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Leer nota del final

—¿Ally? —dice Keith tratando de llamar mi atención pero no puedo despegar los ojos de aquella escena que me causa un ardor imposible de soportar.

Dibujo una sonrisa en mi rostro no muy convincente pero que espero que pueda lograr convencer a Keith de que es real.

—¿Si? —pregunto y él inspecciona mi rostro buscando algo de emoción en mí.

No muestres emoción Ally ¡No lo hagas!

Dios, ¿Eso es una mueca?

—¿Estás bien? —pregunta en un tono calmado como si decirlo fuera algo individuo, como si con una pregunta como ésa fuera a explotar.

Aunque técnicamente pasaría...

Odiaba ésa pregunta, si mi cara estaba bien significaba que yo lo estaba, por eso las personas sonríen y no muestran emoción. Justo por eso, por que odian que le hagan ésas preguntas estúpidas. Y, aunque no culpo a Keith ya que sólo trata de ser agradable conmigo, me molesta.

Mirada viajó nuevamente hacía ellos que seguían explorando descaradamente la boca del uno al otro. Respiro profundamente y miro a Keith que espera por mi con una rara expresión de confusión en el rostro. Trató de sonreir y antes de que pueda darme la vuelta para regresar por donde había venido lo pienso un par de veces.

No les daré el gusto de que me vean con superioridad, no definitivamente no lo haría. No me afectaba en absoluto ¿No es cierto?.

Trato de convencerme mientras doy unos cortos pasos hacía mi aula que se encuentra a un pasillo de distancia con Keith a lado.

Tomé fuertemente el brazo de Keith después de cerrar los ojos y suspirar.

Esto no me afecta, esto no me afecta.

Me repetía una y mil veces en mi cabeza, no tenía que afectarme, no tenía por que sentir un nudo en mi garganta ni mucho menos un ardor recorrerme todo el cuerpo. Apreté mi agarre en el fornido brazo de Keith y éste en ningún momento se quejó pero sabía que estaba ejerciendo fuerza.

Al pasar a su lado su apasionado beso había culminado y maldecí en voz baja por ello. Johan ladeó su cabeza lo suficiente para poder mirarme y que una sonrisa ladeada apareciera en su rostro. Lo mire a los ojos y tragué saliva al ver lo rojos que se encontraban éstos. Esta vez no resaltaba el azul de sus ojos si no el rojo que se encontrqba alrededor. Un leve escalofrío me recorrió el cuerpo y me obligué a apartar la mirada en cuanto miré como Leah le acariciaba la mejilla junto con el cabello.

Apreté los labios en una fina línea y seguí mi camino sin mirar atrás.

-*-

Para mi buena suerte —Que no era mucha — No volví a ver a ninguno de los dos. Pero para mi mala suerte —Que era mucha —compartía clase de literatura con él.

Después de verme por unos minutos con Sofie en la cafeteria y comer algo ligero para no quedarme dormida en alguna clase con mi desvelada de la noche anterior me encontraba caminando hacía mi última clase.  Pensé en que tal vez hoy tampoco aparecería en la clase pero me había equivocado ya que él estaba ahí, sentado en su lugar habitual a mi lado concentrado en su móvil.

Resoplé y me dirigí a mi asiento pero antes de que pudiera sentarme le dediqué una rápida mirada. Me senté derecha levantando el mentón mostrando una seguridad que esperaba que se viera reflejada en mi mirada tanto como en mi postura.

—Así que primero con tu novio y después con Keith —su voz llena mis oídos en sepulcral silencio que se habia instalado al rededor. Lo miro con sorpresa en cuanto lo escucho decir aquellas palabras, logró percibir un ligero tono de burla pero que sin embargo eh captado. Arqueo una ceja en su dirección y me lo encuentro mirando enfrente para después mirarme. No sonríe. Me mira con indiferencia. Y, dispuesta de lograr hacer lo mismo lo imito.

Johan (Into the Darkness)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora