A Luhan le dolía la cabeza. Quizá de tanto pensar, o del golpe en la nuca. O quién sabe, puede que le duela por Sehun. Es incapaz de abrir los ojos, y no sabe cuánto ha pasado desde aquel día. ¿Cuánto lleva dormido? Sabe que en el momento que abra los ojos no sabrá qué hacer. Los ojos... Él recuerda que conserva los dos, pero...
La imagen cruel se deposita en su mente cada minuto, está traumatizado de por vida. El secretario de un psicólogo con problemas mentales; el chiste se cuenta solo. Los pensamientos y recuerdos que pasan por la mente de Luhan son demasiados, no los puede contener en su estado de catarsis emocional. Todo lo que ve es negro; siente negro, huele negro, toca negro, oye negro. Pero recuerda, oh, recuerda en color. El rojo, el que antes era su color favorito, le hacía llorar mares, océanos. No era capaz de soportar esa presión que suponía presenciar un acto tan vomitivo, repulsivo, abominable.
Pero, maldita sea, sólo pensaba en él. En cómo le habían afectado los sucesos. ¿Y Sehun? ¿Se había detenido a pensar en él? Lo había hecho, pero no estaba seguro de cuántas veces. Y Luhan quería que fueran muchas, porque de verdad le importaba Sehun.
Verlo ahí tumbado... Él se acuerda de su hueco, vio que le faltaba un ojo, y Dios, esa imagen no sólo le traumatizó, sino que, si él se sentía así, Sehun debía estar ya camino del psiquiátrico. Era triste, lo era de verdad, el pensar que un ser querido ha sufrido tanto.
¿Cómo sería no ver por un ojo? ¿Qué se sentiría tener un hueco en esa parte de tu cara? Quizá era algo macabro pensar en ello, pero al fin y al cabo, Luhan tenía todo el tiempo del mundo para plantearse cosas por el estilo.
Sentía frío, pero como siempre, negro. Llegaba de vez en cuando a encontrar la calma, pero en momentos puntuales, y ésta desaparecía poco a poco. Notaba algunas veces un reloj apresurado, que no cesaba su tick tack tick tack. Ponía su mente patas arriba.
Otra cosa que sentía es un piano, muy bien tocado y relajante. Parecía que tuviese toda la calma que a Luhan le faltaba. Igual se imaginaba un mar en calma, con olas chocando al ritmo del piano, lentas.
Le dio tiempo a preguntarse muchas cosas, como por ejemplo qué fue de Baekhyun ese día. No entendía dónde lo habían llevado, y aunque nunca le prestó mucha atención al chico, en realidad lo echaba de menos y temía por si le había pasado algo. Sentía pena de él, y no de la buena. En el fondo le guardaba un poco de rencor por intentar seducir a Chanyeol.
Ese día Luhan estaba soñando, con una montaña rusa. Salía Yifan, y le ordenaba cosas, no entendía muy bien la situación. De pronto el vagón en el que estaba subido Luhan comenzó a descender más y más, hasta que se descarriló y Luhan despertó de un golpe después de tanto tiempo.
Sudaba mucho, y sentía la boca seca. Miraba a todas partes buscando agua, pero en lugar de eso se encontró a Jongdae. Palideció unos instantes al ver la manera tan brusca en la que se había levantado Luhan, pero luego se relajó al notar que sus sentidos estaban al cien por cien. Con un gran esfuerzo se levantó de la cama y arrastró los pies pesadamente por la habitación.
Estaba lloviendo cuando miró por la ventana, había truenos y relámpagos. Eso no ayudó mucho a que se sintiese mejor. Pero lo dejó pasar por alto. Sabía que eso no tenía nada que ver con el tema. Se volvió silenciosamente hacia Jongdae y fácilmente le dijo:
"No era tú hermano, ¿verdad?""
A Jongdae le pareció raro que le dijera eso, pero con aire pesado asintió.
"Tu hermano está en su casa, tranquilamente, probablemente sin saber nada de lo que ha pasado."
Jongdae no evitó morderse los labios al sentirse culpable.
ESTÁS LEYENDO
The Red Gun || HunHan ✔
Fanfiction"¿Por qué... ya no nos comunicamos como antes?" "Porque ya no nos amamos como antes." ➣Pareja: HunHan. ➣Duración: 7 capítulos + Epílogo. ➣Género: Angst, Romance. ➣Portada: AByun0497