Los dias se han vuelto monótonos. Todo se repite una y otra vez. Ningún día tiene su magia.No hay nada que haga al día extraordinario. Todo se repite; me despierto, voy al colegio, atiendo a clases, me estreso por todo lo que tengo que hacer, regreso a mi casa, veo series o me dedico a leer (una actividad que me saca de aquella rutinaria vida), luego me doy cuenta que cae la noche y en ese momento mi vida cotidiana vuelve a empezar.
Aquel lunes era soleado, pero yo prefería leer mi libro "Insensible", un libro que uno de mis amigos me recomendó, la primera vez que lo leí me atrapó y no he parado de leer.
Xavier!!- oigo una voz que interrumpe mi lectura- vamos a salir, preparate- la voz de mi mamá llegaba desde la sala.
-¿A donde vamos a ir ?- pregunté gritando.
- Vamos a ir a matricularte en un curso de francés.
Mi mama piensa que aprender nuevos idiomas me servirá para un futuro, por eso ya se hablar ingles y portugués y solo tengo 17 años. En esos cursos no hice amigos, solo me concentraba en atender y seguir con la rutina, se que este nuevo curso será lo mismo que los anteriores; llegaré, me sentaré lejos de todos, pasará el tiempo y regresaré a mi casa.Eso todos los sabados.
-Ya esta bien, en 10 min estoy listo- le dije a mi mama.
Me cambié de ropa, cogi mis audifonos, mi libro y me dirigí al carro.Media hora después ya estabamos en la Alianza Francesa, era un edificio pequeño, parecia una casa de la época de la colonia europea, debido a que está en medio de grandes edificios su belleza clásica sobresalía. Entramos y mi mamá se dirigio a administración mientras yo me maravillé con la biblioteca. Entré a la biblioteca, eran dos pisos de libros, para mí era el paraíso, como niño chiquito fui corriendo de esquina a esquina viendo todos los libros, pero para mi sorpresa todos ellos estaban escritos en francés. En ese momento me di cuenta que quería aprender aquel maravilloso idioma con el único propósito de leer aquellos libros.
-Tendrás clases en las tardes - me dice mi mamá cuando yo entraba a la administración.
-Esta bien- respondí.
-Disculpe, buenos días - me dirigí a la recepcionista- ¿Como puedo retirar libros de la bibloteca?Es fácil- me respondió- solo tienes que dar tu número de matrícula y pagar 20$ como garantía y podrás sacar cuantos libros quieras.
Muchas gracias- respondí, mientras me imaginaba cuantos libros leería durante todo el curso. Ya quería que fuera sábado para poder aprender francés e ir aquella hermosa bibloteca.
Toda esa semana pasé pensado que libro leeria primero el sabado. Cuando el ansiado día llego, yo tenía que estar a las 2 de la tarde en la alianza, asi que llegue 1 hora antes para conocer el lugar donde pasaria varios años.
Esa hora pase en la biblioteca, a pesar de no entender ningun libro estaba emocionado. Pasaron 40 min y sali de aquel paraíso para dirigirme a mi primera clase.
Subí unas pequeñas escaleras para ir a la sala 201, era un aula pequeña donde las sillas estaban en las paredes de tal manera que formaban un espacio en medio.
Entré al aula, y salude a la profesora, me senté en la esquina alejada de la puerta.
Habian pasado 5 min cuando un señor, de unos 35 años, entró.-Bon sour a tout- dijo aquel señor mientras se sentaba en la fila al frente mio.
-Bon sour- respondió la profesora.
Luego me explicaron que "bon sour" significaba "buenas tardes".Luego siguieron llegando personas, un joven de unos 25 años y dos chicas, yo calculé que eran mayores de edad ambas,luego llego una señora con una joven, era obvio que eran sobrina-tía.
Cuando ya eran las 2 de la i, estabamos 14 personas, incluyendo a la profesora.
La clase empezó, y yo estaba muy emocionado, aprendimos las cosas básicas del idioma; las vocales, como saludar, los principales verbos como "hacer" y "ser".
Salimos al receso, como eramos solo los 14 en toda la Alianza, nos dieron un sanduche y un jugo, cuando volvimos a clases, la profesora a7n no llegaba así que el resto del grupo aprovecharon para conversar.
-Me llamo Alberto- dijo aquel señor de 35 años a la señora que creía que era tía -¿Y usted?
Soy Sandra- respondió aquella señora- y ella es mi sobrina-nieta Maria Paz - añadió.
Yo oía todas las conversaciones.
Minutos despues llego la profesora, con una noticia, que teniamos una nueva compañera.
Seguido de la profesora, entro una chica de unos 17 años, tenia unos ojos color café avellana los cuales cuando los rayos del sol llegaban se tornaban verdes, su cabello le llegaba hasta un poquito mas abajo de los hombros, y era bajita. Ni bien entró me fasciné con ella.
-Hola a todos - dijo aquella chica que entraba al salón- soy Katty, perdón por la demora - añadió aquella linda chica.