Sueño Azul // OS // LarryS

Increíblemente mentira

Me encontraba otra vez sentado en la plaza. Para ser un Tomlinson esto me dejaba humillado. Sí, ser el renegado más deseado de la escuela, vestir con camperas de cuero y ser adicto a Adidas era tradición en la familia. Pero ahí me encontraba sentado, esperando a mi cita.
Mi primo me había contado sobre un chico, alto de ojos claros con cabello rizado y nos había presentado por internet lo cual resultó bastante bien.
Con cita me refería encuentro, como dos amigos, o eso pensaba al principio...
Ya eran las 4:30pm y acordamos vernos a las 4:00pm, no es que sea obsesivo, la impuntualidad no me agradaba, pero si a Harry.
Comencé a mirar a los costados, algo desanimado, para acto seguido, irme a mi casa; pero a lo lejos se asomaba un chico, alto, de rizos y vestido con camiseta azul. No lograba ver demasiado pero acababa de bajar de su auto, también azul oscuro.
Venía caminando hacia mí y fue raro, era mucho más lindo de lo que creía... Pero no podía pensar en eso ahora, ya bastante tenía con los castigos de papá y sus peleas con mamá solo por seguir mis estúpidos sentimientos.
Se acercó y firmemente extendió su mano, yo también hice lo mismo y a los segundos habló:
-Hola Lou, soy Harry, perdón por tardar pero esto de venir a otra ciudad me pierde, ya sabes...- habló con voz ronca y lenta, creí que en cualquier momento me daría un paro cardíaco.
Idiota, debo sacar esos pensamientos de mi cabeza.
-No importa, te entiendo.- Me levanté del banco y me acomodé a su lado, era mucho más alto que yo y por eso me costaba mirarlo disimuladamente.
-Hola, un gusto que hayas venido, a veces me cuesta salir con otras personas, la mayoría se interesa mas por mi dinero que por mi...- miré al piso algo apenado, pero volví a hablar:
- Y tu, ¿que cuentas de tu vida? ¿Estudias? Y es así, ¿en qué carrera estas?- y decidí callarme un poco, hablé tan rápido que parecía que me iba a quedar sin aire.
- Bueno Lou, si no te molesta que te diga así, estoy estudiando abogacía para seguir la tradición de mi familia- dijo, sonrió y mordí mi labio cuando vi sus hoyuelos.
Pero fue en ese momento en el que, por quedarme mirando su sonrisa, me llevé puesto un poste de luz.
Lo último que recuerdo fue el maldito objeto que iluminaba la calle a milímetros de mi rostro.
Me desperté en el piso y a mi lado estaba Harry, arrodillado a punto de hacerme respiración boca a boca.
¿Cómo puede ser que haya llegado a esta situación? Aunque no pudiese resistirme y lo que más quería era que él este cerca mío.
Lo miré, me sonrió, le sonreí, si leyese mentes estaría en grandes problemas.
Me extendió su mano, me levantó y seguimos caminando. Tenía brazos musculosos lo cual me volvía cada vez más loco. Hablamos sobre cómo había conocido a mi primo, entre otras cosas.
Cuando menos nos dimos cuenta, llegamos al lago que estaba a unas pocas cuadras de la plaza, eran ya las 5:00pm y a esa hora no había casi nadie por las calles.
De sorpresa, me alzó y me llevó al borde de la pequeña cascada que había. Sin previo aviso me tiró, lo cual me dejó sorprendido, ¿qué le pasa a este chico?, aunque no puedo negar que es divertido todavía me quedaba algo de seriedad.
-No te saldrás con la tuya, maldito- dije con voz de macho, o algo parecido.
Sin previo aviso lo tomé de sus tobillos y lo tiré como pude.

Punto para Tomlinson.

No pude contenerme al ver su expresión de odio mientras susurraba algo que no logré entender, y comencé a reír fuerte.
Casi sin poder respirar ya, sentí como, por debajo del agua, algo me agarraba de la cintura y me empujaba hacia abajo.
Abrí mis ojos y pude ver a Harry, bastante cerca mío y con sus manos en mi...

Mierda, ¿qué hacía con sus manos en mi trasero?

No me negué, es más, hasta me gustó.
Aún bajo el agua pasé mis manos por su cuello y lo atraje más a mi.
Acerqué mis labios a los suyos para besarlo, pero milímetros antes siento como me levanta. ¿Qué hace? Pensé, pero luego me acordé que como todo ser vivo, necesita respirar, al igual que yo.
Decidí separarme y salir del agua, sentándome donde el poco sol que quedaba me ilumine ya que el agua estaba algo fría. Él me siguió.