Mi compañera de nado. (Rin Matsuoka & Tú)

Capítulo 1

Narra Rin:

Hoy es el día. Hoy partiré hacia Australia para mejorar mi nado, y así cumplir el sueño de mi padre y de ser nadador olímpico.

Ya tengo todo listo. En 10 minutos me viene a buscar el taxi, para llevarme al aeropuerto. Haru, Makoto y Nagisa estarán allí para despedirme. También estará Sousuke...

Según me dijeron, compartiré habitación con una niña, la cuál irá al mismo centro de natación que yo. Me pregunto cómo será...

Pasaron los 10 minutos, y el taxi llegó.

Me la pasé pensando en cómo sería allá, cómo viviría y si podría cumplir el sueño de mi padre. Estaba muy emocionado.

Al llegar, estaban Haru y los demás. Sousuke no estaba...

Bajé del taxi con mis valijas y me dirigí hacia donde se encontraban mis amigos.

Nagisa: ¡Rin!

Nagisa se abalanzó sobre mí, haciendo que se me caiga una de mis dos valijas.

Yo: ¡N-Nagisa!

Makoto: Deja al pobre en paz. -Dijo riendo.-

Haru estaba serio, mirando hacia otro lado. Como siempre.

Nagisa me soltó y pude notar que tenía los ojos cristalizados.

Makoto: Oh, ¡Haru!

Haru se acercó a mí.

Haru: Así que... hoy es el día.

Rin: Hoy... es el día.

Aunque él no lo demostrara, se notaba que estaba triste.

Rin: Haru... -Lo abracé.- Nunca cambies. -Dije con una sonrisa en mi cara.-

Nagisa: Rin... snif...

Nagisa de nuevo se abalanzó sobre mí, mientras lloraba como un bebé.

Makoto reía, y también se unió al abrazo.

Pude notar cómo unas pequeñas lágrimas se asomaban por mis ojos.

Pasaron unos 10 minutos, y tuve que ir a registrarme para el vuelo.

El registro, más las medidas de seguridad previas al vuelvo, duraron como media hora.

Hasta que... llegó la hora. Los parlantes llamaban a todos los pasajeros de mi vuelo. Llegó la hora de la despedida... y Sousuke no había llegado.

Makoto: Rin, yo... nosotros...

Makoto siempre parece estar feliz y tranquilo, pero hoy... se le notaba que estaba algo triste.

Lo abracé y él empezó a llorar. Nagisa también rompió en llanto y se unió al abrazo. Haru simplemente nos abrazó a los tres.

Al separarnos, pude notar que Haru tenía los ojos cristalizados, y que estaba algo sonrojado.

Rin: Chicos, yo...

Tengo que admitir que yo también estaba muy triste, y a punto de llorar.

Altavoces: Pasajeros del vuelo 101, favor de dirigirse hacia la entrada al avión.

Makoto: -Suspiró.- Es la hora.

Rin: ... los echaré de menos.

Nos abrazamos una última vez y me dirigí hacia el avión.

Me acomodé y miré por la ventana. Haru, Makoto y Nagisa me estaban saludando. Nagisa lloraba como loco, Makoto sonreía con los ojos llorosos y rojos, y Haru... sorprendentemente, sonrió. Verlo así me puso muy feliz, y los saludé con todas mis fuerzas, mientras pequeñas lágrimas recorrían mis mejillas.