Pov. N
Nunca me había gustado beber de mas en realidad casi nunca bebía porque odiaba el ardor que sentía en mi garganta con cualquier tipo de licor por lo que me sentí un poco decepcionado de mi mismo al ver como el vaso se llenaba una y otra vez incluso no note en qué momento lo deje de lado y empecé a tomar directamente de la botella ¿Qué más daba?
Tal vez no debería estar bebiendo en la azotea de aquel hotel y mucho menos encontrándome en mi estado actual pero esta madrugada había decidido cumplir todos los caprichos que deseara. Mi plan era quedarme a ver el amanecer con una botella de vodka al lado esperando la hora final. Tenía todo listo, lo había anticipado por semanas, conseguí el licor sin que los demás chicos se dieran cuenta (lo que había sido difícil ya que todos se habían puesto de acuerdo para vigilarme) también con un poco de dinero logre que el conserje dejara la puerta de la terraza abierta.
Debía dar una escena algo triste para cualquiera que me viera. Un hombre a punto de entrar a sus treinta, sentado en el borde del techo de un edificio, con una botella en mano y vestido con un traje negro.
Pronto iba a estar de fiesta ¿Por qué no empezar a festejar desde ahora? Las bodas siempre eran un evento alegre.
Y no, no importaba si el traje se arrugaba o amanecía con resaca. Había prometido llegar sin embargo nunca dije como lo haría, nunca había estado en mis planes que los demás me notaran solo permanecería hasta atrás durante la ceremonia y después de comprobar la cobardía de la persona que mas ame en mi vida iría al salón de fiestas a "felicitar" con total hipocresía a la recién pareja, me robaría un botella de alguna mesa y me perdería en cualquier lugar donde podría estar solo.
Era un plan perfecto. Un comienzo perfecto para un nuevo intento de vida nueva.
Recordé porque me empeñe tanto en ver el amanecer la vista era hermosa y los colores únicos aunque si las lagrimas no estuvieran corriendo por mi cara y empapándome los ojos podría ver mejor todo.
Se lo había prometido. Le había prometido que a pesar de cualquier cosa, pasara lo que pasara no me vería llorar y ahora estaba aquí sin poder ocultar mi dolor, la única confortación que me quedaba era que él no me estaba viendo por lo tanto no rompería mi promesa. Los sollozos que tanto intente retener empezaron a escapar.
Sin pensarlo un segundo me levante y empecé a caminar hacia el departamento que él y los chicos habían rentado para esta noche especial.
Podía escuchar los ronquidos de Ravi y algunos balbuceos por parte de Ken, todos estarían dormidos ahora después de todo la despedida de soltero había estado intensa. Conociendo hacia qué cuarto iba evite pisar el bulto que era Hyuk durmiendo en el suelo justo debajo del sillón donde dormía Hongbin.
No toque y simplemente entre en la habitación del afortunado novio próximamente marido.
Iba a ser caprichoso e insolente esta noche.
Pov. Leo
Suponía que debía estar feliz mañana sería un día muy especial o al menos era lo que todos me habían dicho ¿Por qué no lo sentía así? Sentado en un sillón del bar solo, esa no era la mejor despedida de soltero que podía tener.
Ravi se había desaparecido por un momento al ver algo; mejor dicho alguien en la pista de baile a saber dónde y que podrían estar haciendo ahora, Ken estaba totalmente perdido en el sillón contrario a él, se lo había advertido: tomar los esos shots de manera tan rápida no le harían bien pero como siempre no lo había escuchado y por otro lado Hyuk y Hongbin que había ido al baño a no sé que cosa no regresaban aun y ya habían tardado demasiado.
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Dynamite - Three Shot Neo
FanfictionEsa noche se entregarían todo, sus cuerpos convirtiéndose en uno solo antes de tener que separarse definitivamente. Sin remordimientos. Podran culpar al alcohol mañana y comenzar una nueva vida separados sin embargo esta noche es solo para ellos dos...