Por las noches te miro,
veo tus ojos tiernos,
pero cuando te enculo
se te ponen como huevos duros.
Tu belleza es preciosa,
tu ternura es admirable,
es por esa garganta que tienes
que entran muy bien los glandes
Cuando te vi por la calle
me pareciste una estrella,
no solo por la belleza,
sino por lo que tenias entre las piernas
La oscuridad se hallaba
no parecía salir,
no mas cuando salió
eso parecía la bandera de Japón
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PoetryPoemas sobre la vida misma, el amor al rojo vivo, poemas de un gran poetiso