Un día de verano un chico se sentía enamorado locamente, pero la chica que el amaba no le hacía ni caso.
Este chico llamado Jack se sentía inútil, pensaba que el amor de su vida era aquella chica llamada Isabella.
Al ver que Isabella no le hacía ningún caso se puso a llorar sin parar, estuvo día y noche llorando sin parar, dejó de comer, sólo estaba en su habitación llorando. Sus abuelos preocupado le llevaron a un psicólogo para que le ayudarán pero no le ayudó de mucho, ya que esa noche se escapó de casa y fue atropellado.
Cuando los abuelos recibieron la trágica noticia salieron corriendo hacia el hospital y el doctor le dijo que estaba en estado grabé y que estaba en coma.
La abuela se quedó todo el tiempo que estuvo sin conocimiento en la habitación que le habían asignado, hasta que un día despertó.
La abuela entre lloros no le dejaba de dar besos y los doctores la decían que le dejarán hacerle pruebas.
Después de las pruebas dejaron que los familiares le vieran y se alegraron todos de que estuviera bien.
A los dos días después le dieron el alta pero tenía que ir en silla de ruedas para que no hiciera movimientos bruscos, a la salida del hospital estaban todos sus amigos de su Instituto su edificio y entre ellos la chica que le gustaba.
Ella se acercó a el y le iba a dar un beso pero Jack no la deo y la dijo:
"No quiero que salgas conmigo por pena si no porque de e edad te guste y me quieras, que no te de vergüenza decir este es mi novio" y después de estas palabras se fue con sus otros amigos que estaban allí, y de tanta alegría porque no le había pasado nada montaron una fiesta y conoció a otra chica que de verdad quería a Jack.
