El comienzo de un amanecer

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Todo comenzó un enero, 27 exactamente un año atrás, era de noche estaba confundida no sabia donde estaba, miraba de lado a lado preocupada pero lo único que veía eran arboles y arbustos, unos cuantos ojos aparecían con un brillo peculiar, eran criaturas del bosque lo sé, porque una ardilla paso corriendo por mis pies, dí un salto hacia atrás y caí -torpe ardilla- un poco sobre saltada me levante y comencé a caminar, no había caminado mucho cuando baje la mirada y me dí cuenta de unas pisadas perfectamente contorneadas en la tierra, estaba asustada pero trate de calmarme un poco -tal vez sea que...eh caminado en círculos... -si es eso- trate de hablar firme pero la voz se me cortaba, ignore aquellas huellas y avance por el lado opuesto que aquellas huellas raras no dejaba de repetir esas palabras para calmarme -"eran mías solo caminé en círculos" aún que aquellas huellas eras más grandes que las mías no sé por que no lo había notado, quizás sí lo note, pero por lo nerviosa y aterrada que estaba trate de darles una nueva forma -tengo que salir de aquí- trate de contener unas lágrimas pero al final solo fue en vano porque al momento comenzaron a bajar por mis mejillas, mire al cielo esperando ver unos pequeños rayos de sol que me dijeran que empezarla a amanecer puesto que así seria mas fácil encontrar el camino a casa, las dudas comenzaron a brotar en mi mente -¿que hago aquí?, ¿como llegué? ¿por que estoy sola?- cansada llegue a una pequeña roca y me senté en ella, al poco rato escuche unos cánticos, eran melodiosos y me recordaron a mis padres, tanto como mí madre como mí padre cantaban muy dulce, sorprendida por el canto comencé a seguir las voces, me llevaban a un lugar aún mas obscuro que la otra parte de el mismo, cuando me detuve no escuche nada más no había nadie -sera que este alucinando?- de pronto una sombra alta con forma de humano se acercaba a mí, tenia rasgos de ser hombre alto, cabello corto es lo único que note, eran rasgos visibles ya que esta persona o espíritu no tenía rostro, era una sobra totalmente negra, sé que estaba mal, pero quería saber que era aquella sombra -¿quien eres?-
le pregunte, como lo había previsto no contestaría, baje la mirada y viendo su mano, me acerque para tocarla y de pronto una gran luz azul celeste salio de ella, me aleje de un salto, todo comenzó a desvanecerse y yo también, parpadee tres veces y ya no estaba en aquel bosque estaba en mi cuarto, con mi madre sentada en un lado de la cama -¿m-mama?- sentí su abrazo tan cálido como ningún otro -temía perderte- me dijo con voz preocupada -¿que paso?-
le pregunte mirándola a los ojos -pues despertaste gritando y bañada en sudor te toque la mejilla y estabas ardiendo en temperatura salí del cuarto para traer unas cuantas cosas para bajar tu temperatura al regresar estabas dormida trate de despertarte pero fue inútil- dijo mirándome -cuanto tiempo estuve inconsciente- le pregunte confundida, -cuando vine eran las 4:00 de la mañana y ahora son las 7:00, -trate de sentarme y le dije -ve a descansar- no fue fácil convencerla pero al final conseguí que se fuera a la cama, me sentía aliviada ya que supe que todo era un mal sueño.

Cuando estaba de nuevo en mis cinco sentidos me levante, aún estaba sudando pero al parecer la temperatura había bajado,decidí ir al colegio, lo cual no tenia mucho sentido ya que eran mas de las 7 a.m pero no quería perder el examen, después de haberme cambiado, baje las escaleras en camino al cuarto de mi madre, que aún estaba dormida, no sabia si despertarla o no pero, no quería perder más tiempo hablando con ella para que me dijera lo que ya sé "que estoy enferma y que es mejor que me quede en cama", decidí dejar una carta "hay un examen hoy y no quiero perder lo, no te preocupes por mi la temperatura ah cedido atte.: Denisse ".

Sin hacer ruido tome mis cosas y me fui de casa, no podía sacar de mi mente aquel sueño, estaba muy confundida y aterrada y el hecho que estuviese afuera de mi casa a las 7:35 a.m no mejoraba nada, había mucha niebla, no era de extrañarse por aquí el clima no es muy bueno, pero lo que si, se me hacia raro era, que no había personas afuera siempre a estas horas las vecinas están afuera colgando su ropa húmeda, solo se escuchaban pequeños pajaritos cantando, continué caminando aun que no lograba ver nada por la niebla sabia bien el camino, "el clima es pésimo" pensé hay mucho frío tal vez por eso no había ni un alma en la calle, saque mi móvil de las bolsas del pantalón para ver la temperatura 3 °C, un poco preocupada por mi estado volví a guardar en móvil, el clima estaba tan frío pero por la temperatura que tenia estaba sudando y ardiendo en calor, no me importaba lo incomoda que me sentía no me iba a quitar el suéter que llevaba si de por si ya estaba enferma si me sacaba el suéter de seguro que empeoraría.

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