Trilogía Imposible: 3. Pide un deseo

Capitulo 10

¿Hermanos? ¿Qué sentido tenía eso?

-No lo entiendo.

-¿Ella no te lo dijo? –quiere saber aterrada, la observo unos segundos y niego ante su cara de pánico. –Oh por Dios.

-Explícame ahora mismo Roxanne –exijo cuando ella se pone de pie y comienza a caminar de un lado para otro. -¿Cómo es que ellos son hermanos? ¿Papá tuvo un hijo extramatrimonial? ¿Cuándo apareció? ¿Sabía él de nuestra existencia?

-No Fidel... -se detiene y mira fijamente en una dirección. Camina hacía allí y se sirve un vaso de whisky para ella y trae uno para mí. –Dios... pensé que te había dicho todo con tal de que aceptes otra vez estar con ella.

-No Roxanne, Piera no quiere decirme mucho –repito aceptando el trago. Ella toma el suyo de una vez y me mira con sus ojos tristes.

-No sé si debo decirlo.

-No debes, pero tienes que hacerlo –suspira un par de veces y vuelve a sentarse.

-Yo no sé cómo no lo recuerdas Fidel. Tenías la edad suficiente para recordar cuando mamá se marchó y papá formó nuestra nueva familia...

-¿Mamá se marchó? No... no lo entiendo.

-Fidel, nuestra madre no es Odette –dijo bajando la mirada avergonzada. –Nuestra verdadera mamá se llama Nora, ella dejó a papá luego de sus reiterados engaños y nunca más volvió a vernos. Odette es la madre de Piera.

-Pero... -quedo en blanco. Algo me dice que eso no es algo que no recuerde, sino algo que no sabía en lo absoluto. -¿Mamá es madre de Dante también?

-No... -trago saliva –Piera no está relacionada sanguíneamente con nosotros. Piera tiene otro padre que también es padre de Dante, es por eso que son hermanos. Por lo que entendí el padre de Piera dejó a mamá cuando supo que tenía un amorío con nuestro padre y formó una nueva familia.

-¿Qué...?

-Cuando papá y Odette se juntaron tú tenías unos 4 años y quizás no lo recuerdas... pero yo tenía 7 y lo sé claramente –ella ni siquiera está mirándome a los ojos. –Odette siempre fue linda con nosotros, no podemos quejarnos, es por eso que nunca dije nada y ellos tampoco.

-Roxanne... ¿Cómo pudiste?

-¡Yo sólo quería tener una familia normal Fidel! ¡Demándame! –explotó comenzando a llorar. –La habíamos pasado suficientemente mal como para explicarles a todos que éramos una familia ensamblada, yo estaba feliz y ellos también lo estaban. Tú no recuerdas nada de nuestra verdadera madre, los maltratos que sufrimos porque papá llegaba borracho y la golpeaba a ella y ella se desquitaba con nosotros... tú no sabes nada.

-Incluso si no recuerdo Roxanne –digo tratando de sonar calmado, a decir verdad una furia inexplicable me estaba invadiendo -¿Cómo fuiste capas de sostener semejante mentira durante todos estos años?

-¿De qué te serviría saberlo de todos modos? Si no hubiera aparecido este muchacho a descubrir la verdad nunca lo habrías sabido y nada habría cambiado.

-¡¿Nada habría cambiando?! –exclamo poniéndome de pie. -¡Me estás tomando el pelo! Piera y yo teníamos una relación ¿Entiendes? Sabes lo mal que lo debemos haber pasado por amarnos cómo lo hacíamos y no poder hacer nada al respecto.

-A pesar de todo lo hicieron ¿Qué cambiaría?

-Poder vivir nuestro amor en libertad Roxanne –digo de mala gana. –Dios... eres tan...

-Nosotros éramos felices Fidel, hasta que Piera comenzó a enamorarse de ti, no podía dejar que eso pasara no quería que se destruya nuestra familia, de haberlo dicho en ese momento todo se habría ido a la mierda.

-¿Felices? ¿Estamos hablando de la misma familia? –consulto con enojo. –Tú no sabes nada de nuestra familia Roxanne, siempre estuviste alejada. Querías mantener una fachada que sabes muy bien que no es real. Papá es un alcohólico, mamá es una ninfómana y tú una maldita mentirosa. Piera y yo nos amamos... ¿Dime que tiene de normal y feliz todo eso?

-Rocco gay... ya lo sé –dice ella y yo me quedo en blanco unos segundos ¿Rocco gay? –pero yo quería, necesitaba que todo fuera un poco normal...

-NO-LO-SOMOS. Debes entender eso. Mantuviste una mentira por tantos años y te explotó en la cara. Ahora entiendo porque ella no quiere saber de ustedes, mucho menos de ti.

-Ella siempre... -comenzó a llorar aún más angustiada –ella siempre fue la preferida de papá, incluso aunque no fuera su verdadera hija siempre la quiso más que a mi.

-¿De qué hablas?

-No lo entiendo ¿sabes? Yo hacía todo bien pero siempre tenía que ser el ejemplo para la pequeña Piera que era taaan perfecta.

-Tú sabes perfectamente que no es así. Papá no tiene preferencia por ninguno, de hecho creo sinceramente que no nos quiere.

-No es así. Él siempre apoyaba  a Piera en todo, no sé porque pero siempre ha sido ella por sobre nosotros y ella ni siquiera es su verdadera hija -continúa llorando pero sin mirarme. Respiro un par de veces y largo un suspiro, nada de eso tenía sentido.

-Te estás contradiciendo Roxanne... dices que es mi hermana pero que no es su verdadera hija.

-Lo sé... -se ríe; ella parece reírse de su propio malestar –es por eso que no los quería juntos.

-¿Por qué?

-Nunca he querido que ella sea feliz. La odio.