El Lado Perfecto [KaiSoo/KaDi]

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Las horas pasaban y comenzaba a ponerme ansioso, no es que Yeri fuese una pésima compañía, es sólo que la idea de que KyungSoo esté con Sehun sin mí, no me agradaba. No pude decir nada para asistir y eso me ponía de nervios; ChanYeol parecía intranquilo mientras Yeri relataba casi toda su vida, que irónico, hace un momento estaba muy a gusto con ella, tanto que olvide la presencia de KyungSoo, pero ahora que se había marchado comenzaba a sentir su ausencia.

Me disculpé esperando que Yeri no se enojase, ChanYeol aprovechó mi intervención para marcharse también, pero ninguno se ofreció a llevarla a casa, era posible que ChanYeol no lo hiciese porque notó los gestos que tenía BaekHyun durante el lapso que estuvo con nosotros, KyungSoo solo parecía aburrido y eso me enojaba, esperaba que pudiera ponerse celoso aunque sea un poquito.

—Podríamos alcanzarles en la costa –mencionó ChanYeol notando mi evidente desánimo.

—No lo creo, esta obscuro lo más seguro es que en lo que vamos ellos estén de vuelta, despreocúpate.

—Kai, ¿te despediste de KyungSoo? –Negué con la cabeza –Parece que no se da cuenta, es decir no sabe que aun te gusta.

—De hecho creo que lo sabe, pero lo ignora tanto como yo—suspiré—Mi madre lo sabe y...

—Mierda ¿Enserio?—parecía sorprendido, a decir verdad no le había contado sobre ello.

—Sí, bueno...me prohibió intentar cualquier cosa con KyungSoo—comenté—Por ahora sólo me mantengo al margen con él. No quiero hablar sobre eso...

—Bien tú ganas, pero, deberías saber que hacer porque un día él encontrara a alguien y no quiero verte llorar.

—Yo no lloro –me metí en mi carro ante su sonrisa, y me fui de vuelta a mi casa.

Cuando llegué era algo tarde y mi hermana ya había partido al aeropuerto, así que me quedé solo. Encendí la televisión pensando en las palabras de ChanYeol, quizás tenía razón, ¿cuándo no la había tenido? no recordaba ni una sola vez. Miré el reloj, me tomé bastante tiempo pensando tonterías y ya eran las 10 de la noche, pensé que tal vez KyungSoo ya habría llegado a casa, aunque de todas maneras no le llamé, decidí subir a mi habitación y acostarme a dormir.

Mis ojos estaban cansados, habían sido muchas cosas durante el día, pensaba en ellas mientras las imágenes en mi cabeza se distorsionaban a causa del sueño, de pronto escuché mi celular de fondo, no contesté y decidí dejar que sonara hasta que dejaran de intentarlo. Sonó nuevamente y me desesperé por completo, tomé el teléfono, vi el nombre de KyungSoo y contesté con una sonrisa en el rostro.

—¿Qué quieres KyungSoo aún no te vas y ya me extrañas? –escuché su risa del otro lado de la línea.

—Sólo quería despertarte—respondió.

—Si claro –contesté con sorna y él rio nuevamente, adoraba su risa.

—Nos vamos muy temprano mañana, supuse que como ibas al colegio no podrías ir a despedirte así que decidí llamarte y darte ese privilegio –bromeó, yo sonreí estúpidamente, no hacía falta verme en el espejo para imaginarme de esa forma.

—En ese caso nos vemos KyungSoo, espero que te diviertas mucho, no te olvides de tu amigo JongIn y espero que le traigas un bonito y costoso recuerdo.

—Desvergonzado –dijo y no pude evitar reír –Bueno mucha suerte en tu partido ojala que ganen aunque realmente lo dudo.

—No KyungSoo, esta vez estoy seguro que ganaremos podría apostar mi vida.

—Apuéstala entonces –dijo en tono desafiante.

—Te apuesto mi preciado Mustang a que ganaremos –se escuchó cierto silencio, supuse que por la sorpresa.