CAPITULO 2

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Todo empezó hace un año. Era un día normal, aunque me costó bastante levantarme. Decidí ponerme ropa cómoda y ligera ya que empezaba el verano y empezaba el calor. Bajé a desayunar, en la cocina estaban mi hermana mayor, Clara, y mi madre, cada una atendiendo a su cosas y casi ni se percataron de mi presencia, hasta que salí de casa dando un portazo. Mi padre me estaba esperando en el coche para llevarme al colegio.

- Buenos días! Llegamos tarde lo sabes ¿no?- dijo alegremente.

- Sí lo se, arranca o no llegaremos

Llegué tarde a la primera clase pero ese día la profesora no estaba y a la sustituta le dio un poco igual que yo llegara tarde. La mañana fue bastante tranquila, tuvimos clase de matemáticas, lengua e inglés y antes de el recreo el director vino a nuestra clase a dar unos avisos para la excursión que organizaba el colegio en unas semanas. Era una excursión que todo alumno de 4º de la ESO y 1º De bachiller ansiaba. Íbamos los dos cursos juntos, la excursión era a Grecia y habían programado unas actividades bastante chulas.

En el recreo estuve en la biblioteca con una de mis mejores amigas, Marta, repasando un poco para los posibles exámenes sorpresa que podía poner la profesora de Química antes de la excursión. Después del recreo nos tocaba gimnasia y estuvimos jugando al voleibol. A ultima hora de la tarde teníamos alemán, aunque lo sustituyeron por una sesión informativa sobre la excursión, los profesores estaban muy pesados con el comportamiento y las normas, aunque es comprensible ya que iban con alumnos de 16-17 años que estaban en plena pubertad.

En definitiva fue un día normal y transcurrió igual que todos los demás. Llegué a casa bastante cansada, no había nadie, mi madre estaría trabajando, mi padre debería de haber salido a hacer algunos recados y Clara estaba en la universidad. Mi madre es empresaria y directora de su propia empresa y mi padre es militar, de momento no le requieren en ninguna misión nueva pero creo que no tardarán en reclamarle y volverselo a llevar. Ninguno de ellos volvería hasta la hora de la cena, así que hasta entonces estaba sola. Decidí darme un baño y escuchar algo de música para relajarme un poco. Cuando salí del cuarto de baño mire el móvil y vi que tenía un mensaje de Alejandra: "¿ te apetece salir con Alvaro, con Marta y conmigo esta tarde?" Me pienso un poco la respuesta que le quiero dar, la verdad es que no me apetece mucho salir, pero necesito despejarme un poco así que decido contestarle que sí. Me visto y bajo al salón a esperar a que llegue la hora para ir a la cafeteria en la que he quedado con mis amigos. Mientras pongo la tele y me sirvo un poco de zumo que ha quedado del desayuno, luego me vuelvo a sentar en el sillón y me doy cuenta de que encima de la mesa hay una carta que tiene el sello de las fuerzas armadas. No puede ser, no se lo pueden volver a llevar tan pronto. En ese momento me llama Ale:

- ¡Hola Kate! Oye estoy cerca de tu casa ¿te parece bien si paso y nos vamos juntas hasta la cafeteria?

- Sí, claro. Te espero en el porche

- Vale, nos vemos ahora.¡ Xao!

- ¡Hasta ahora!

Sigo sin creerme lo de la carta, pero prefiero no darle importancia, seguro que simplemente es una carta de reconocimiento o algo así. Salgo de casa y me siento en el porche a esperar a Alejandra. No tarda en llegar y nos dirigimos juntas a la cafeteria donde estan los demás. Por el camino hablamos de cualquier tontería y nos reímos mucho, al final he hecho bien en salir y olvidarme de la carta. Llegamos a la cafeteria y nos dirigimos a la mesa del fondo donde están Alvaro y Marta.

- Hola Chicas! Que tal?- saluda Alvaro

- Bien ¿ y vosotros?¿ Lleváis mucho esperando?- saluda Alejandra

- ¡Que va! Diez o quince minutos, no mucho, no os preocupéis- dice Marta.

- Bueno ¿ Qué os apetece hacer depués? ¿ Vemos una peli?- Propongo yo.

Everithing is OkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora