Narrado por Anastasia.
Las cosas se nos iban de las manos. Todo se estaba complicando mucho. ¿Qué clase de persona se echa un novio tan psicótico como ese? La trata bien pero la secuestra, ¡eso no tiene ni pies ni cabeza! No tenía ni idea de cómo íbamos a solucionarlo todo, aunque siendo sincera, mi prioridad era que los chicos recordaran la memoria. Pero a la vez no quería, es decir, tenía un lio bastante preocupante en la mente. Quería, en cierto modo, porque ninguna persona se merece perder los recuerdos, las cosas vividas y las personas conocidas, por muy malos que sean; pero por otro lado, ¿y si James sentía algo muy fuerte por una persona y, al recordarlo, la echaba de menos y quería volver con ella? Sé que es egoísta por mi parte pero no quería hacerme a la idea de poder perderlo. Me gustaba bastante, hacía mucho tiempo que un chico no me gustaba de esa manera y no quería estropearlo. No una vez más.
Yo no he tenido mucha suerte con los hombres, ni si quiera me miraban, pasaban por mi lado y era invisible, y para una vez que encuentro a uno guapo, listo y que merece la pena, no quiero dejarlo escapar. Sé que no somos novios y que no debería ser tan ''posesiva'' pero es algo totalmente inconsciente. Surge de mi interior y no puedo controlarlo, sino lo haría, porque ese sentimiento de miedo lo detesto con toda mi alma.
Respecto a Ana, claro que quería encontrarla. Yo viene hasta aquí para poder ayudar a los chicos a buscarla, a pesar de que no la conozca, seguro que no es mala chica y nadie se merece pasar por lo que esa chica está pasando; pero, aunque me importe, no sé, no me causa emoción que todos estén tan sumamente preocupados. A ver, que lo estoy, pero...
Bueno, mejor lo dejo, porque contra más hablo más emporo las cosas.
—¿Y ahora que se supone que debemos hacer? —Preguntó James.
—Ir a buscarla, obviamente. —Contestó Marcos.
—Primero deberíamos averiguar dónde están. —Sugirió Álex.
—Si Anastasia se hubiera quedado más tiempo, quizás ya lo sabríamos... —Farfulló Marcos.
—Estaba ocupada con otras cosas, pero oye, tú a lo tuyo. —Le respondí de malas maneras.
¡Encima que me preocupo por ellos y todo lo hago mal! A Marcos le tengo que caer mal, eso como poco, porque yo creo que ese chico me odia. ¿Por qué siempre tenía que atacarme con alguna pulla? ¿No podía estarse callado? O al menos podía valorar el trabajo que hago, que no solo me preocupo por James y Álex, sino que sin conocerle, también me preocupo por él. Que yo sepa, la búsqueda de la bruja para que deshaga ese hechizo que tienen hecho también lo ayudará a él.
Peeero no... Somos todos unos egoístas aquí.
—¡Estabas buscando tonterías porque nosotros no tenemos ningún hechizo hecho! —Me gritó Marcos. ¿Pero éste que se ha creído?
—¡Deberías al menos darme las gracias! ¡Me estoy preocupando por ti tanto como por los demás sin ni si quiera conocerte! —Le recriminé.
—¡Lo haces porque quieres! —Reclamó.
—¡Lo hago porque no soy una egoísta! —Contraataqué.
—¡Chicos, parad! —Intervino Álex. —Tenemos cosas mejores de las que preocuparnos que vuestras ridículas discursiones.
—Ni si quiera sabéis que vamos a hacer. —Dijo Marcos de malas maneras.
—Tenemos que rastrear el móvil de Ana y hablar con Jenna, ella conoce a todas las personas de este barrio, supongo que sabrá más o menos quiénes han podido ser y más si conoce a las personas del pasado que nos odian. —Propuso James.
Sin pedirme opinión ni a mí ni a Marcos se pusieron a andar dejándonos a nosotros atrás. ¿En serio?
—¿Qué opinas del plan? —Me susurró Marcos. Acabábamos de tener una riña y me hablaba como si nada hubiera pasado. Yo sinceramente me doy por vencida con estos chicos, no entiendo su bipolaridad.
—¿Ahora me hablas? —Le dije resentida.
—No seas tonta y dime qué opinas del plan. —Me dijo con una sonrisa de disculpa, a lo que yo rodé mis ojos. Qué le vamos a hacer... Después de todo es un tío, y a ellos sí que no hay quien los entienda.
—Pienso que es una mierda. —Dije encogiéndome de hombros.
—Entonces compartimos algo. —Comentó pasándome el brazo por mis hombros. —Te propongo algo.
Lo miré dudosa y con miedo. Marcos era el tipo de chico que sus propuestas eran peligrosas, como las del diablo. Él hablaba de Annabel, pero era igual que ella, también pedía siempre algo a cambio o, peor aún, te metía en un lío que era difícil de salir. Imposible, me arriesgaría a decir.
—No quiero hacer ningún trato contigo. —Contesté apartando su brazo.
—¡Si aún no sabes cuál es! —Se quejó.
—Tus propuestas no son nada buenas. —Dije negando con mi cabeza. —Así qué olvídate.
—Te ayudo a investigar la historia de Nueva Orleans si me ayudas a rescatar a Ana como es debido. —Añadió con una sonrisa lasciva. —Vamos, sé lo que te gusta la historia de aquí y cuando vine, no solo me emborraché (que también), sino que aprendí muchas cosas.
Dudé unos minutos. Si acepto aliarme con él tengo que estar segura de las consecuencias que me puede acarrear esto.
—Sabes que no puedes negarte a tal propuesta. Además, soy buen investigador. No todo lo vas a encontrar en las bibliotecas.
—De acuerdo, acepto, pero como me traigas muchas dificultades, te dejo tirado. —Avisé.
—No te preocupes amor, si yo cuidaré muy bien de ti. —Dijo mientras que, de nuevo, pasaba su brazo por mis hombros. —Y como te he dicho, aprendí muchas cosas... —Comentó mientras que me guiñaba su ojo derecho.
—¿Cuál es el plan? —Pregunté omitiendo sus insinuaciones. Su sonrisa traviesa no me gustó ni lo más mínimo...
Esto va a estar genial. Nótese la ironía.
SÉ QUE ESTE CAPÍTULO ES CORTITO, PERO SON LAS DOS Y CUARTO DE LA MAÑANA, TENGO SUEÑO Y MI INTERNET NO VA BIEN. LO COMPENSARÉ. :(
¿QUÉ OS PARECE LA NUEVA ALIANZA QUE SE HA FORMADO? ;)
ESPERO QUE OS ESTÉ GUSTANDO. BESOS Y PRONTO VUELVO. <3
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PD: HE SUBIDO UN VÍDEO CANTANDO EN INSTAGRAM, ME GUSTARÍA BASTANTE QUE DEJASEIS COMENTARIOS Y OPINIONES. SUBIRÉ MÁS VÍDEOS CON OTRO TIPO DE INSTRUMENTALES QUE PEGUEN MÁS CON MI VOZ. :S
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Creo que me he enamorado... (Terminada).
Teen Fiction¿Os acordáis de mí? Sí, sí, soy James. Ese que era el mejor amigo de Ana y que a su vez también amigo de Álex. Ese que se enamoró de ella como un loco. Ese que siempre estaba a su lado en sus peores momentos. Ese que consiguió conquistar su corazón...