La prueba De Las Palabras (Pausado)

Lo Hice Feliz (2)

Naruto ya se encontraba en ese espacio en blanco, mientras que a Naruto le decian "Fenómeno" "Vámonos de aquí" "Cuidado es... Es él de nuevo"

A Gaara le decían cosas como "Monstruo" "¿Porque no te mueres?" "Ni siquiera lo miren" o en ocasiones ni siquiera lo nombraban por su nombre.

—Creía que comprendía a Gaara, pero no lo comprendía ni un poquito. —Dijo Naruto a la mujer. Apenas y se le entendía algo de lo que decía.

En realidad, Naruto nunca estuvo en esa oscuridad en la que Gaara estaba sumergido, Gaara estaba en la verdadera oscuridad, una oscuridad en la que cualquier luz era borrada.

Naruto se tomaba el cabello con frustración y se lo jalaba, ya no quería seguir viendo la vida de Gaara, ni siquiera era una vida. ¿Porque tenía que ser él, el que pasará por esto?

—Calma, Naruto... Lo que le pasó a Gaara fue... —Trataba de consolar la mujer, Naruto se encontraba sollozando en el pecho de esa dama, mientras palmeaba un poco su espalda.

—¡¡FUE LO MÁS HORRIBLE QUE EH VISTO EN MÍ VIDA!! —Gritó furioso.

—Se lo que sientes pero...

—Él... *Sniff* Él siempre estaba diciéndome *Sniff* que no renegara tanto... —Al fin se tranquilizo Naruto, se sentó sobre sus piernas cruzadas y se limpiaba las lágrimas —Que... No tenía todos los problemas del mundo sobre mí. *Sniff* Que tenía salud y con eso era suficiente.

—Gaara tuvo que madurar a una corta edad. Es bastante sabio.

—siempre miraba... *Sniff*... Los pequeños detalles.

—Naruto... Eso sólo demuestra que Gaara sí te ama. —Aquella mujer no sabía que decir, no tenía nada que decirle. Absolutamente nada.

—Cuando me le declare... Él se asusto... *Sniff* Me dijo: "Estas mal de la cabeza, jamás amaria a alguien. Sólo vete."... Nunca me di cuenta de que Gaara tenía miedo a que... A que...

—Gaara no vive en el pasado. Pero el pasado siempre lo hace temblar.

—Tenía miedo a que yo lo traicionara. —Al fin puede entender Naruto porque Gaara era y es tan inseguro —Pero, me dio la oportunidad. Me dio muchas. Demasiadas.

—............ —La mujer se levanto del sofá y camino en ese espacio en blanco. La habitación comenzó a tomar el aspecto de un parque.

—A Gaara le gustan los parques... —Le dio el dato, Naruto, con una sonrisa temblorosa.

—¿Entiendes a Gaara? —La mujer se sentó en un columpio mientras que el Uzumaki que seguía llorando estaba en el césped.

—...... No.

—¿Ni un poco?

—Cuando era niño, la gente me señalaba. Hacia travesuras para llama la atención de todos. Iruka siempre estaba ahí, e incluso el viejo Hokage... Siempre había alguien.

—¿Y? —Comenzó a columpiarse.

—No viví en un mundo de mentiras, no viví en el mundo en donde MÍ PROPIA sangre me diera la espalda. No fui criado para ser un arma... No... No fui... Mí vida no... Mí vida no se vio amenazada por mí tío. No me obligaban a nada... Yo... Yo... Era feliz a comparación de Gaara... Yo... Lo tenía todo.

—¿Porque me dices esto?

—Porque no puedo entender a Gaara... Porque yo... Yo... Tuve infancia, tenía una vida. A Gaara prácticamente lo obligaron a seguir el camino del asesino... Sí Iruka-sensei, Kakashi, el viejo, o cualquier persona que yo ame, me hubiera atacado a matar, yo... No hubiera resistido. Yo... Me hubiera suicidado.

—Entonces... ¿Quieres decir que Gaara es fuerte? ¿Que Gaara no es humano? ¿O que?

—Hay ocasiones en la que no se sí Gaara sea humano, es decir; es tan amable, educado, inteligente, gentil, fuerte, generoso, divertido, está tan lleno de vida... Tanta perfección no puede ser posible.

—¿Un ángel?

—Gaara deberia estar a un lado de Dios. O ser el mismo Dios. No lo se. Él es... Es... —La garganta de Naruto dolía, sentía algo atorado. Sus labios se movían pero no salía palabra.

—¿Porque lloras?

—.... Porque yo no puedo hacer feliz a Gaara. ¡¡Mírame!! —Naruto se levanto del césped de un salto y se señaló —Soy tan débil que no puedo soportar la idea de recordar a Gaara. Mí hijo... Iba a ser padre.... Explore ese cuerpo miles de veces y nunca me di cuenta... Perdí un hijo sin que yo lo supiera ¡No estuve cuando me necesito!

El espacio quedó como en cementerio, todo estaba en silencio. Naruto sentía cada vez más y más enojo consigo mismo, y se arrepentia más de lo que le había pedido a Tsunade. Sí tan sólo le hubiera puesto más atención, estaría con él en este momento.

—¿Quieres seguir con esto? —Pregunto por fin la mujer de cabello corto.

—No... No quiero...

—En ese caso-

—Pero lo haré... —La mujer se sorprendió —Por primera vez... Quiero saber... Quiero saber todo antes de olvidarlo.

—Bueno... Continuemos...

—¡Espere! ¿Usted... Odiaba a Gaara?

—¿Porque me preguntas eso?

—Eres su madre ¿No?... La mujer que lo dio a luz.

—...... Puedes llamarme Karura.

—Aún no me contesta.

—..... Todo a su tiempo, no estas aquí para saber de mí, sino de ti y Gaara.

—"En la día más caluroso, la arena está fría"... Gaara decía mucho eso, me dijo que escuchaba una voz femenina, de usted... ¿Que significa?

—................... Todo a su tiempo.

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Continuara....