Eterno [MLB] // Gabrinette.

Capitulo 2

Marinette aterrizó sobre un cuerpo.

Sus ojos no podían ver nada después de aquella luz tan intensa pero no se preocuparía por eso ahora. Debía detener a Tempus-Fugit en cuanto pudiera. Debía ser rápida.

No le importaba cuanto gritara bajo ella, tomó el aerosol y se lo roció.

Poco a poco los gritos cesaron y su ceguera también.

Cuando pudo ver vio que debajo suyo no estaba Tempus-Fugit ni la persona antes de ser akumatizada; pero un hombre con traje y corbata.
Dejó de apretar el aerosol.

«¿Qué?»

Aquel hombre miraba el techo y luego a ella. Parecía desorientado.

–¿Qu-quien eres?–tartamudeó asustado.

Miró a su alrededor.

–¿Do-donde estoy? ¿Quién soy?

Marinette abrió los ojos con sorpresa.

Levantó la mirada repentinamente y se encontró con cientos de rostros horrorizados observándola.

Todos con traje, corbata y protegiéndose detrás de sus maletines.

¿Porqué había tanta gente allí?

Entonces miró a la habitación donde se encontraba y se asustó al encontrarla totalmente diferente que hace unos segundos.

Las paredes y techos no estaban sucios, ni cubiertos de moho y telarañas.
Los pisos estaban limpios y las ventanas desempolvadas.
Todo se veía increíblemente pulcro.

«¿Cómo es posible?»

–¿Porqué no recuerdo nada?–comenzó a lloriquear el hombre debajo de ella.

Marinette se levantó de golpe.

Todos comenzaron a gritar y correr.

Corrían de ella, de la heroina de París, de la persona que siempre estaba salvándolos.

«¿Porqué huyen de mí?»

Entonces escuchó entre los gritos:
–¡Alguien llame a la policía!

«Pero si no soy la villana»

Un pitido la sacó de sus pensamientos. Debía encontrar un lugar rápido donde pudiera transformarse en su forma civil de nuevo.

Entonces comenzó a correr y saltar a la salida lo más rápido posible, pero al llegar a la puerta se detuvo de golpe.

Afuera estaba toda la policía de París esperándola, con armas cargadas.

–¡Detente en nombre de la ley!– gritó uno de los policías que parecía ser el jefe. Pero en definitiva no era el agente Roger.

Escuchó un sonido fuerte que provenía del cielo.

Subió su mirada al helicóptero que estaba encima de ella, pero se distrajo inmediatamente con el enorme cartel en el edificio.
"Besançon and Company"