Monster: You're my lucky one (OT12)

9. Amor "no" correspondido

Baekhyun, como siempre, fue el encargado de hacer que todos se enteraran que las últimas personas que faltaban habían descubierto sus habilidades. Era una noticia importante, porque de esa forma era probable que sus monótonas vidas en el laberinto cambiaran un poco. La noticia hizo que todos comentaran y murmuraran hacerla de las ventajas y desventajas de conocer sus poderes. Sólo Kris y Tao salieron de la sala sin decir una sola palabra, pero eso no era algo nuevo. Lo hacían con frecuencia. 

Cuando la reunión terminó, Baekhyun no pudo evitar darse cuenta como, naturalmente, ciertas parejas se formaron. Desde que llegó, Kyungsoo se había auto.proclamado novio de Kai y pasaban todo el tiempo que podían juntos. Luhan no disimulaba cuando estaba con Sehun. Suho y Lay siempre practicaban juntos, incluso si el segundo no tenía habilidades de batalla. Chen fastidiaba a Xiumin hasta que él lo golpeaba y Tao jamás se separaba de Kris. 

Su situación era diferente a la de los demás, era más complicada. Su vida se resumía a morir de amor y matar de desamor. Así de simple. No importaba cuánto le gustara Chanyeol, qué tan atraído se sintiera por él o cuánto lo quisiera: siempre lo rechazaba. Porque Baekhyun sabía cosas que los demás no. Eso le impedía estar con Chanyeol, incluso si su carita desconsolada destrozara su alma cuando tenían una discusión al respecto. Lo frustrante era que, incluso si tenía una idea de lo que sucedía, no podía estar seguro porque temía ser engañado y manipulado. De lo único que estaba seguro es que no quería lastimar a su gigante y ponerlo en riesgo. Por eso prefería convencerlo de que su amor no era correspondido. 

Cuando Baekhyun fue llevado al laberinto, Chanyeol fue la primera persona que conoció. Se hicieron amigos de inmediato. Practicaban juntos y superaban las horrorosas pruebas apoyándose en el otro incondicionalmente. Había ido olvidando gran parte de las primeras fases, pero nunca la intensidad que sentía por su relación. Recordaba con nostalgia el momento que consideraba el más felices de su vida. 

Una de las memorias más lejanas que tiene de ese lugar es la que sintió estando muy débil, porque experimentaban con ellos. Chanyeol lo veló por muchos días. No comía, no dormía con tal de asegurarse que estuviera bien. Parecía aterrado ante la posibilidad de perderlo. Cuando estuvo recuperado, el gigante lo besó inesperadamente por la emoción de encontrarlo de pie y con mejor semblante. Estaba agradecido porque tuvo la fuerza para curarse. 

Al pasar a la siguiente fase, los dividieron en ley y caos. No hubo un cambio significativo en sus vidas, así que no tomaron muy en serio los grupos. Ambos escogieron caos, pensando que podrían juguetear y ser más libres con sus travesuras. No eran una pareja de novios, eran amigos que no dejaban que el otro se sintiera solo. Así empezó su doloroso romance. Pasaron de sus juegos a manos entrelazadas y luego a besos ocasionales. Todo terminó como una historia de amor contrariada. 

Cuando su relación empezó a mejorar, Baekhyun desapareció por un tiempo. Al regresar, todo lo que avanzaron regresó a cero. Chanyeol intentó darle espacio, pero la actitud del pelinegro sólo empeoraba. Lo que había pasado es que el número 4 se había enterado que sus sentimientos podían poner al gigante en peligro. No quería ser el culpable de eso porque no podría vivir con la culpa. 

–¿Celoso?– la grave y profunda voz de Chanyeol interrumpió sus dolorosos recuerdos. 

–¿Por qué lo estaría?– respondió secamente. 

–Miras al resto de chicos como si te gustara poder estar así con alguien. Tengo la ligera impresión de saber quién es la persona con la que te gustaría pasar tiempo. 

–Nada ni nadie me interesa en este lugar, Chanyeol– aseguró sin mirarlo. El más alto bajó la cabeza derrotado. 

–Te extraño tanto– confesó finalmente. –Extraño las cosas como eran antes.