Era una mañana muy común y corriente como todas mis mañanas en el colegio, el sol brillaba, comenzaban las clases, todo era monótono. Yo solía esperar una amiga todos los días para irnos juntas a casa, en esa espera lo vi... No le presté mucha atención, no la suficiente como para recordar su rostro, dijo algo extraño y yo sonreí... Nunca pensé que lo volvería a ver pero no fue así.
Una noche chateaba con un amigo por messenger todo marchaba muy bien hasta que me dicen "hola" por el chat de mi amigo me pareció algo extraño que me volviera a saludar (pensé que era una broma) pues yo le sigo los pasos y resulta que no me hablaba mi amigo; sino aquel chico que había visto en la salida del colegio... Al chatear con el esa noche sentía una extraña sensación que recorría mi cuerpo, algo que nunca había sentido pero no le di importancia a esa extraña sensación.
Pasaron los días y lo veía en el colegio, hablábamos por WhatsApp, comenzábamos a tener una hermosa amistad.
Era un chico de piel morena, alto, hermosa sonrisa, al mirarlo me perdía entre sus ojos, jugaba fútbol, era muy cariñoso, atento, seguro de sí mismo, cosas que a mí realmente me encantaban, poco a poco me fue gustando la manera en que él me miraba, mi corazón se aceleraba cuando me hablaba, con solo sentirlo cerca me alegraba el día.
Cada día pensaba en el, no lo podía sacar de mi mente... Una locura total, quien diría que enamorarse por primera vez sería tan hermoso y especial...
¿Algunas vez han deseado estar con una persona por el resto de su vida? Pues, yo sí, y esa persona era él.
Recuerdo una actividad que realizaron en el colegio, esa mañana hablé con él solo un rato, algunos compañeros estaban dirigiendo la actividad; cuando de repente veo que el tiene el micrófono en sus manos y dice: "Te quiero Princesa" juro que fue un momento único, nadie sabía que nos gustábamos, todo mundo le preguntaba ¿Quien es Princesa?... en ese instante sentí como un flechazo al corazón, cosa que no debía sentir, pero pues en las cosas del amor uno no tiene control.
Todo marchaba muy bien hasta que me enteré que él tenía novia, si la tenía, realmente eso le dio un giro a nuestra historia, no podía entender muchas cosas y una de ellas era el ¿"como él se enamoró de mi"? ¿En verdad estaba enamorado de mi? ¿Todo era un error?.
Aún así no dejaba de pensar en el y él no dejaba de insistir, supuestamente él ya no quería a su novia, yo me sentía muy mal, porque pensaba que yo era la causante de que él ya no la quisiera y todavía me sigo sintiendo de esa manera. Pasaban los días el y yo aún seguíamos hablando, aunque trataba de evitarlo no podía insinuar que él no estaba ahí, presente en mi corazón, en mi mente se había formado un huracán de preguntas sin sentido y sin respuestas.
Resulta que todo se va complicando en cierto punto, exactamente el 25 de febrero del 2015, yo iba de camino al ala este del colegio y él salía de uno de los salones, hace tiempo que el "quería hacer algo" y pues me dice que lo mire a los ojos, yo realmente no podía fijar mis ojos en los de él, pero al fin y al cabo los fije, en ese instante él me besó... Esos segundos apegada a sus labios fueron únicos, no podía creer lo que estaba pasando, era mi primer beso, con el chico que me gustaba, quedé total mente en chock, no sabía que pensar ni que decir, él me dijo "perdón" y yo solo dije "no debiste hacerlo ( eso salió de mi mente más no de mi corazón).
Pasaban los días todo era hermoso, mis ojos miraban el mundo de manera diferente, creo que todo era efecto del amor...Del amor que por él sentía, por cuestiones del fútbol él tuvo que irse a Venezuela por unas semanas y verdaderamente no me importó la distancia mis sentimientos hacia el seguían intactos. Al llegar de Venezuela no nos veíamos muy seguido ya que yo siempre tenía algo que hacer, pero aún así los pocos minutos que nos podíamos ver eran muy especiales, recuerdo que yo estaba en un curso de
contabilidad y quedamos de que nos veríamos a la hora de salida, todo perfecto... Yo salgo y lo espero algunos minutos el llega nos besamos y pues cuando vamos en la esquina pasa su novia y le dice: ¡tú si andas!... Juro que en ese momento solo sonreí y me pregunté a mi misma ¿Que estás haciendo? En ese momento no me pude responder ya que lo miraba a él y no podía creer lo que estaba pasando, en fin de camino a mi casa nos detuvimos y me pidió que lo perdonara, pero yo realmente no tenía nada que perdonarle yo estaba siendo cómplice de toda esta situación, un por una parte yo hice que todo eso estuviera pasando.
