<<En un rincón de Enbizaka hay una joven mujer que es dueña de una sastrería
Con una actitud confiable y virtuosa es una chica popular en el vecindario>>
La pila de telas y trabajo se encuentra arrumada en una esquina de la habitación.
Parado enfrente del espejo miro mi imagen, el kimono morado me sienta bastante bien y aun así ese pedazo de basura no regresa a mi lado, ¿Qué puede ser más importante que su amado? Con mis manos deslizo la tela y dejo al descubierto mi pecho, la piel es suave y blanca ¿Cómo se puede resistir a esto?
¿Desde hace cuánto no viene a mi lado? ¿Dos semanas? Es un maldito idiota.
No tengo tiempo para pensar en ello debo concentrarme en mi trabajo, acomodo el kimono de nuevo en su lugar y tomo las tijeras que mi madre me ha dejado, empiezo a cortar la tela y esta cede bajo el filo.
Sé que él me ama. Me lo ha dicho mientras miro sus ojos azules. Desde el primer momento en que lo vi fue amor a primera vista, llevaba su kimono azul oscuro que le quedaba tan bien y aun con la estúpida expresión que puso al verme supe que era amor mutuo.
Y aun así no regresa a casa...
<<Pero debo seguir con mi trabajo. Sostengo mis tijeras con fuerza en una mano.
Las tijeras de coser que son un recuerdo de mi madre. Si las afilas bien ellas cortaran mejor>>
Debo sacármelo de la cabeza o no podré seguir con mi trabajo.
Lo mejor es dar un paseo. Salgo del taller con un parasol en mano, no me gustaría broncearme la piel, sé que a él le gusta que este pálida.
-¡Ichimatsu-chan!-volteo para encontrarme con la regordeta cara de una de mis clientas, con rapidez pongo una de mis mejores sonrisas, odio las interacciones sociales pero para mantener el negocio lo mejor es guardar las apariencias y en todo caso porque usa el chan conmigo ¿Acaso no sabe que soy un hombre?-Es raro verte fuera del taller... ¿Muy poco trabajo?
-No, al contrario señora Yamada tengo bastante es solo que de vez en cuando es bueno salir a despejarse- y de todos modos qué diablos le importa a esta mujer lo que haga.
-Tienes razón querido, en fin te dejo las compras no se harán solas-Me despido de ella y sigo con mi camino.
Ah hace un detestable sol mañanero, como lo odio.
Un gato pasa en frente de mí y me obliga a detenerme para acariciarlo, el animal comienza a ronronear mientras acaricio su cabeza, tiene el cabello negro y me recuerda al suyo, me pregunto si él estará pensando en mi...
-¡Mira un gato!-levanto la vista y mis ojos morados se posan sobre él, viste su kimono azul y viene caminando hacía mi pero... ¿Quién diablos es el que lo acompaña?
Usa un kimono rojo y van tomados de la mano, siento como mi corazón se arruga en mi pecho, un nudo se cierra ensobre mi garganta. Ya veo... entonces por eso no has vuelto a mi lado, ¿Prefieres a una puta vestida de rojo antes que a mí? ¿Qué tiene él que no tenga yo?
No puedo soportarlo más, doy media vuelta y regreso a la sastrería, de todos modos tengo que continuar con mi trabajo.
<<Pero debo seguir con mi trabajo. Sostengo mis tijeras con fuerza en una mano
Mientras mi mejillas se mojan con las lágrimas, trabajo duramente recosiendo el kimono >>
-Ichimatsu-kun deberías tener cuidado-Dice la señorita a la cual le estoy entregando el pedido que ordeno, su mirada parece cargada de sincera preocupación mientras me mira-Al parecer hubo un asesinato por esta zona la victima ha sido un hombre joven... es mejor que vayas con cuidado, no me gustaría que te pasara nada.
ESTÁS LEYENDO
The Tailor Shop At Enbizaka/BL/Yaoi/Au
FanfictionSong-fict de Osomatsu-san basado en la canción de Vocaloid "The Tailor Shop At Enbizaka" de Luka Megurine. Pareja: KaraIchi