Iva por el pasillo del instituto High School Centre buscano la puerta de mi clase, número 23, cuando me encontré un chico alto, fuerte y moreno. En ese mismo instante todo lo que me rodeaba se congeló y únicamente podia observar su bello rostro. Segundos más tarde me toco el brazo y me dijó:
-Hola soy James, y tu nombre? Estoy buscando la sala 23.-
En ese preciso momento supe que era demasiada casualidad que fuéramos a la misma clase y lo único que se me ocurrio responderle fue:
-Ashly. Yo también busco la sala 23. Iremos a la misma classe no?-
-Sí, Supongo. Muchas gracias. Si quieres vamos juntos hasta el aula así lo encontraremos más rapido.-
Y sin decirle nada me puse a su lado y andamos juntos. Cuando el aire había llenado el vacío entre él y yo empezamos ha hablar de cosas sin importancia hasta que llego el punto en que si no estubiera en la conversació pensaría que estábamos ligando.
-A que insti ivas, Ashly?-
-Al HSW, y tú?-
-Al Centre School, me pregunto si dejaste algun que otro chico en ese insti por venir aqui...-
-James si te refieres a un novio, la respuesta a tu indirecta es un no.-
-Me parece extraño que una chica tan bonita como tu no estubiera con nadie, en fin, creo que hemos llegado.-
En ese momento le sonreí, no podía creer que el chico alto, fuerte y moreno que había visto al principio me hubiera dicho eso.
Entramos por la puerta de la sala 23 y había 4 sitios vacíos: dos juntos, y dos separados, como se sentó en uno de los sitios que estaban juntos supuse que quería que me sentara a su lado. Cuando llegó el profesor, se presentó:
-Buenos días. Soy el profesor Suresh, y seré vuestro tutor de aquí en adelante, tal y como estais sentados permanecereis todo el curso. Ahora si empezaremos.
Cuando terminó la clase, yo aún estaba recogiendo cuando James me vió y me esperó:
-Gracias per esperarme James.-
-De nada, me tendré que acostumbrar si vamos ha estar todo el curso juntos.-I me giño un ojo.-
-Quieres comer conmigo?-Lo solte sin pensar lo ridicula que era la pregunta.-
-Serà un placer Ashly.-
Andamos hasta la cafeteria, cada uno cogió su comida y no sentamos en una mesa. Una vez allí, en un silencio profundo, él me cogió de la mano suavemente rozando mi piel, levanté la mirada y nuestros rostros se quedaron mirandose a los rostros fijamente.
ESTÁS LEYENDO
La razón de mi existencia
RomanceEste libro cuenta la historia de una chica que llega nueva a un instituto y conoce a James, un chico que des del principio le atrajo, empezaron ligando mientras se gustaban entre ellos, hasta que empiezan a salir.