Secrets
En el gimnasio de la preparatoria Seirin se encontraba un chico pelirrojo junto a un peli-celeste perfeccionando sus pases y tratando de conocerse un poco más. El peli-celeste se encontraba un poco frustrado ya que aunque fueran un gran dúo en la cancha él sentía algo más por el pelirrojo, en realidad lo amaba por eso deseaba conocerlo más a fondo quería conocer todo de su luz así como él conocía todo de sí, bueno casi todo.
— Kagami-kun... has estado extraño ¿qué te pasa?
En realidad no era mentira desde la mañana el pelirrojo se mostraba distraído pensando en quien sabe cuántas cosas, en cierta forma lo inquietaba ya que era la persona que amaba y verlo con ese gesto serio y triste le dolía.
— Nada, no es importante – respondió cortante
— Claro que es importante no por nada estas frunciendo el ceño además de distraído – respondió mostrando sorprendentemente cierto disgusto por la respuesta anterior
— Kuroko son mis problemas, no te incumbe
— ¿Qué? – Pregunto sorprendido – si me interesa tú eres mi luz y...
— Eso no significa que tenga que contarte mis cosas
— Idiota no solo quiero saberlo porque eres mi amigo... tú a mi... ¡me gustas! – grito terminando por salir corriendo dejando sorprendido a un pelirrojo
Se sentía devastado justo antes de confesarse fue rechazado y lo peor que aun así se declaró, ahora ¿cómo miraría a Kagami? ¿Con que cara? No sabía, ahora solo quería correr a su casa por lo que se colocó su uniforme de manera rápida dejando varios de sus botones mal puestos. Salió corriendo del edificio con dirección a su casa aunque realmente ni eso le apetecía porque sabía que se encontraría con su abuela y su madre por lo que no quería tener que dar explicaciones sobre su estado.
Una vez en casa subió corriendo diciendo rápidamente "estoy en casa" escuchado por su abuela. En su habitación se dejó caer en la cama tan solo recordando las palabras de Kagami, aunque simples palabras, en el causaron un gran impacto, ahora se sentía como un estorbo para la persona que ama. Después de un rato el sonido de su celular lo saco de sus pensamientos, al ver la pantalla vio que era su luz, sin embargo no tenía ganas de hablarle por lo que corto la llamada volviéndose a acostar. De nuevo su celular comenzó a sonar algo molesto decidió contestar sin revisar antes de quien se trataba.
— ¡¿Qué?! – pregunto molesto
— Hey ¿cómo le respondes así a tu entrenadora? Ten en cuenta que mañana te daré el doble del trabajo – se trataba de Riko su entrenadora, fue un descuido de su parte el responder así sin ver de quien se trataba pero lo único que le quedaba era disculparse
— Lo... lo siento entrenadora... pensé que eras Ka... otra persona – hablo entrecortado tratando de deshacer el nudo en su garganta
— Me sorprendió que te fueras de esa manera hoy, ¿te paso algo? Kagami no supo responderme y al parecer no le contestas – sonaba preocupada y claro quien no lo estaría si el jugador más persistente del equipo se saltó la práctica sin siquiera avisar – él está preocupado por ti
— Entrenadora ¿podría decirle de mi parte que... mis asuntos no le deben interesar? Por favor – pidió el peli-celeste dejando escapar las primeras lagrimas
— Kuroko-kun ¿qué les paso?
— N-nada solo estoy cansado, nos vemos mañana – susurro cortando la llamada
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Secrets (KagaKuro)
FanfictionMuchas veces tenemos pequeños o grandes secretos, aquellos que no queremos que cualquiera descubra claro que debemos buscar a la persona correcta para confiar. Kagami y Kuroko entenderán esto de una manera u otra, esperemos que ese malentendido no...