SUICIDIOS EN ADOLECENTES

UNA NOCHE

La mire fijamente, sin dejar de parpadear y pensar, este sera mi final? creo que no hay marcha atrás, con valentía y mucho coraje, acerque una silla a donde estaba aquella cuerda colgado con un nudo y antes de ponerla sobre mi cuello vi una foto en donde me veía muy feliz, y pensé "como carajos deje que un simple instante arruinara mi vida" era muy pequeña cuando me tomaron esa foto, recuerdo que ese día de verano, estaba muy entusiasmada, no podía contener la felicidad por un instante, mi madre una mujer soltera y valiente, me miraba y sonreía de verme tan alegre, me dio la mano y nos dirigimos al centro comercial, era un fin de semana y como casi no tenia tiempo para compartir conmigo, trataba en lo posible que el sábado pudiera estar a mi lado, ella una mujer luchadora y que jamas le quedaba grande nada, siempre con la frente en alto y una sonrisa, tenia en ese entonces mi madre 24 años, y yo 7, mi mama quedo embarazada a los 16 años y aunque desde ese instante nadie la apoyo decidió salir adelante conmigo, jamas supe de mi padre, ella jamas me lo contaba, pero al igual yo era feliz tan solo de tenerla. Recuerdo que ese día comimos helado frente a un almacén de ropa, siempre pedía un helado con dos capas de fresa ya que son mis favoritas. Mi mama era diferente pedía un café caliente, me decía que era para mantenerse con energía ya que en la noche le tocaría trabajar muy duro y aunque jamas supe en que trabajaba, sabia que era muy buena, siempre trataba de que las cosas le salieran de la mejor manera y se esforzaba por alcanzarlas al máximo y aunque en la semana nos viéramos tan solo unas horas, trataba de estar al lado mio, preguntándome que hice durante el día. Pero que podrá hacer una niña de tan solo 7 años me decía, mi rutina era levantarme y desayunar, saber esperar el recorrido de las 10:00 de la mañana que me llevaría a la escuela, estudiar hasta las 4:00 de la tarde y el resto de las horas quedarme a jugar en el parque, esperaba a que fueran las 6:00 para irme a la casa a bañarme y esperar a mi madre que llegaría a las 10:00, ella me traía comida, siempre le pedía que fuera una pizza, ya que es deliciosa y me gusta demasiado, de vez en cuando nos sentábamos a comer juntas en la cama, me contaba muchas historias que pasaban por su mente, siempre supe que eran inventadas ya que en algún instante se quedaba pensando por un segundo.

Decidí bajarme de la silla y mirar mas las fotos que tenia al rededor de mi habitación eran artas pero cada una tenia una historia por contar, pero una me llamo mucho la atención.....