Varias horas después Laura despertó sedienta. Esta vez si podía recordar todo. Calculando que ya era bastante tarde salió sin hacer mucho ruido, se sentía un poco débil por lo que en más de una ocasión tuvo que agarrarse de las paredes. Sin embargo pudo llegar a la cocina sin ningún problema, se sirvió agua y volvió sobre sus pasos hasta la sala de estar. Se sentó en el sofá y trató de analizar sus opciones. Se sentía mal y quería irse a su casa pero dada su condición no estaba segura si llegaría. Además, estaba el hecho de que no podía salir e irse sin avisarle a Yugyeom por lo menos, pero no sabía en que habitación estaba y tampoco se animaba a golpear ninguna puerta. En medio de sus cavilaciones una frazada se asentó sobre sus hombros, consiguiendo que diese un respingo por la sorpresa. Cuando se giró a ver quien era se encontró con la cálida sonrisa de Junior.
-¿Cómo estas?-pregunto éste mientras se sentaba dejando una buena distancia entre los dos.
-Mejor...muchas gracias- Laura sonrió. Se sentía afortunada de haber encontrado a esos chicos tan amables.
Luego de ese corto cruce de palabras, quedaron en silencio varios minutos, pero contrario a la primera vez, se sentían tranquilos, cómodos en la presencia del otro.
-Debería irme a casa...-murmuró Laura, hablando con ella misma, casi olvidándose de la presencia del otro chico.
-¡No!-se apresuró Junior dándose cuenta de que había levantado el tono, asique suavizando su voz prosiguió -Es muy tarde y la noche está fría. Es mejor que te quedes...
-Si lo se... sólo fue un pensamiento.-Sonrió una vez mas a ese chico tan atento. -Como dijiste, es tarde deberías estar descansando...
-No te preocupes no tengo sueño además no me gusta dormir amontonado. Me gusta tener mi propio espacio...
-No me digas que te quite tu habitación...-Laura no pudo evitar sentirse mal.
-Esta bien de todas formas en las noches tan frías no puedo dormirme, es lindo tener algo de compañía...- Junior trató de darle confianza, retándose mentalmente por no haber pensado antes de hablar. -¿Cuál es tu nombre? Se siente un poco raro hablar con alguien sin saber como se llama...
-Si es cierto, perdón por eso. Me llamo Laura, pero me dicen Lau... es más simple.-
La conversación se volvió más amena y el tiempo paso sin que lo notarán.
Cuando la mañana llegó, Jb se levantó apurado. Debía despertar a su invitada antes de que su mánager llegara junto a todo el equipo. Con cautela entró a la habitación, encontrándola vacía. "Se habrá ido mientras dormíamos" pensó justo antes de atravesar el pasillo y encontrarla dormida en el sofá al lado de Junior, ambos cubiertos con la misma frazada.
Apenas se acercó, su compañero abrió los ojos sorprendiéndose de verlo parado mirándolo fijamente. Con lentitud se levantó sintiendo las consecuencias de la mala postura. Dormir sentado no era lo más recomendable. Apenas sus sentidos terminaron de despertarse se giró a hacia Laura con la intención de despertarla. Pero la mano de su líder lo detuvo.
-Ya la hablo yo. Tienes que ir a cambiarte, ya van a llegar...-susurro Jb, pero con la voz lo suficientemente firme para que Junior no se opusiera.
Una vez sólo, el líder del grupo se acercó y con una voz suave la despertó. Laura abrió los ojos y se irguió sobre el asiento. El sonrió de manera inconsciente, al verla mirar a su alrededor todavía adormilada.
-No quiero ser mal educado- dijo, manteniendo su tono suave -pero tenés que irte. Van a llegar personas con las que trabajamos y no pueden saber que dormiste acá...-
Ni bien lo escucho la muchacha se paró de golpe tirando la frazada al suelo. Ambos se agacharon a recogerla y sus miradas se cruzaron, quedándose congelados en la misma posición por unos segundos, hasta que ruidos provenientes de la pieza los sorprendieron. El le sonrió y terminó de levantar la tela.
-¿Ya estas despierta Lau? ¿Cómo te sentís?-apareció un sonriente Yugyeom.
-Emmm... si...si. Ya estaba por irme- confesó Laura devolviéndole la sonrisa.
-¿Tan rápido? ¿no vas a desayunar con nosotros?- el menor se veía algo decepcionado.
-Ya están en camino- comentó Youngjae, consciente de que no habían notado su presencia -¿Cómo estás? Soy Youngjae- Se acercó a Laura.
-Lau... mucho gusto. Gracias por permitirme quedarme- saludo viéndose otra vez rodeada por los chicos. Sólo que ahora si sabía los nombres de cada uno.
-Toma, esta bastante frio afuera- Mark se acercó con el buzo entre las manos, el mismo que se había llevado la primera vez -creo que ya es más tuyo que mío... quizás debería regalártelo- Mark sonrió como aquella vez en esa esquina. Laura se quedó atontada mirando ese dulce gesto que la había acompañado desde que lo había visto.
-¿Estas seguro?-interrumpió Jackson mirando a su amigo, pero al ser ignorado por este, dirigió sus ojos hacia Laura -Puedo darte una de mis camperas, son abrigadas y tengo muchas...- y sin esperar respuesta se fue a su habitación para luego salir de allí cargando una campera negra de cierre grueso.
Laura la recibió sin saber muy bien que hacer. La situación volvía a parecerle incómoda.
-Lau, es mejor que te abrigues así no te enfermas peor- concedió Junior sacándole la campera de Jackson de las manos e instándola a que tomará el buzo que Mark le había ofrecido en primer lugar.
Aún dudosa, la muchacha se colocó la prenda. Con cuidado Junior le asentó la campera en los hombros, diciéndole con una sonrisa que estaba todo bien.
Luego de que Laura terminara de meter los brazos y cerrarla, se quedó mirando sorprendida como los siete chicos le sonreían.
-Vestida así, hasta podrías pasar como uno de nosotros- comenzó a reírse BamBam contagiando al resto -tienes puesto una prenda de cada uno...- Pronto estaban los ocho riéndose, la comodidad y la confianza volvían a instalarse entre ellos y Laura.
-Bueno ya es hora- comentó Youngjae mientras le acomodada en cuello de la campera -Espero que nos veamos otra vez-
-Lo mismo digo-acepto sonriendo la muchacha -Bueno me voy, espero que les vaya muy bien en el trabajo.
-Igualmente- contestaron a coro.
-Esto es tuyo- Jb le entregó su celular. -Por esto viniste esa noche ¿no?-
Ella asintió sonriendo feliz de haber recuperado su celular, del cual no se había acordado en toda la mañana.
Sin más que agregar Laura se puso las zapatillas y salió rumbo a su casa.
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Sintiendo más de Lo Que Se Debe... Got7
FanfictionSólo buscaba vivir en Corea y disfrutar su juventud... pero la vida da mil vueltas y lo que por lo general, son sólo sueños, a veces se vuelven realidad. El problema viene cuando por esos sueños un grupo puede llegar a disolverse...