No tienes que decir nada (McFly)

Capítulo 20: Dougie y su nueva novia.

Como empezaba a ser costumbre en aquellos tiempos, me acababa de despertar en los brazos de Dougie. El dormía de lado. Podía ver perfectamente el leve movimiento de sus labios cuando el aire salía de su boca. Su pelo revuelto sobre la almohada y su perfecto rostro durmiendo tranquilamente. Me encantaba verlo así... se le veía tan tierno... daban ganas de abrazarlo y besuquearlo entero. Pasé mi dedo índice por su nariz. Acariciándola. Siempre me ha encantado su nariz, la veo tan perfecta... Le acaricié los párpados y sus pestañas rubitas hasta que poco a poco se fue despertando.

-¿Esto es lo que se ve cuando te despiertas en el cielo? -me dijo. Yo me sonrojé. A esas alturas todavía no me había acostumbrado a las cosas tan bonitas que me decía. Me dio un beso-. ¿Llevas mucho tiempo despierta?

-No... unos diez minutos.

-¿Por qué no me has despertado?

-Me gusta verte dormir -le dije con una sonrisa. Me acarició la mejilla.

No tardamos mucho más tiempo en levantarnos y bajar a desayunar. En la entrada había varias neveras y Danny las estaba sacando a la calle.

-¡Buenos días! -nos saludó desde la puerta.

-¿Qué hacéis? -pregunté.

-Nos vamos a la playa -y con la misma sonrisa que hubiese puesto un niño pequeño volvió a coger otra nevera y a llevársela a la calle.

-Creo que se me ha olvidado decírtelo -me dijo Doug.

-Si, yo también lo creo.

Desayuné rápido y subí a mi habitación a prepararme, los muy graciosos no me habían dicho nada y no tenía nada listo. Saqué un bolso y metí de todo. Ropa interior, otro biquini, crema, la toalla, ropa seca, las cartas... Me hice una coleta y bajé al salón. Gi, Tom, Izzy, Harry, Danny, Georgia y Dougie me estaban esperando.

-Lo siento -me disculpé.

-Venga, vámonos -Tom se levantó del sofá sonriendo.

Una vez en la calle...

-¿Danny donde has aparcado la furgoneta? -le preguntó Harry.

-Dos casas más arriba.

-¿La furgoneta? -pregunté yo.

-En realidad -Tom me lo explicaba-, es la McFurgo Family, somos demasiados y la compramos hace tiempo para cuando tuviésemos que ir a algún lado todos juntos.

-La Mcfurgo Family...

Comenzamos a caminar hasta que llegamos al lugar donde estaba aparcada. La típica Volkswagen que todo hippie tenía en su época. Plateada, con el techo blanco y con letras de canciones decorándola entera. Sonreí, era muy graciosa.

Tardamos como una hora en llegar a Eastbourne. El sol brillaba y el calor empezaba a hacerse notar. Sacaron todos los bártulos del maletero y nos encaminamos.

-Doug -le dije cuando llegamos al paseo marítimo. Íbamos cogidos de la mano- ¿Y no os va a reconocer nadie?

-Tenemos nuestro sitio. Está casi en el límite entre playa y montaña, solo nos hemos encontrado gente allí un par de veces, y era abuelillos con sus perros.

Lo miré. Llevaba una gorra y las gafas de sol, en realidad todos iban así. Si pretendían no llamar la atención no lo hacían muy bien. Me quité mis gafas para que me diera un poco el aire.

-Te recuerdo que ayer estabas en la portada de una de las revistas mas leídas de este país, yo que tu no subestimaría a nuestras fans -me las volví a poner las gafas rápidamente.