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Brooke, si, ese es mi nombre.
Y os voy a contar mi historia, la cual me ha cambiado la vida.

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Descansaba en mi cuarto rojizo de madera después de un buen partido de fútbol con mis amigos.

Me quité la camiseta de fútbol y los pantalones y lo eché a lavar. Mi piel chorreaba de sudor, entonces decidí irme a la ducha.

Entré al baño, me quité la ropa interior y me metí a la ducha. El agua fría deslizaba por mi blanca piel. Entonces giré el pomo de la ducha para que el agua se calentase.

Tras media hora en la ducha, agarré mi albornoz y me lo puse. Más tarde, cojí una toalla blanca que había en el baño y me la coloqué rápidamente en el pelo formando un turbante.

Me volví a mi cuarto a jugar con el móvil. Entonces, de repente me envía un desconocido un whatsapp.

Abrí el chat y apareció un chico. Me envió un "7u7" y me empezó a hablar.

Le bloqueé el chat y a los dos minutos recibí una llamada de ese chico.

No sabía si coger la llamada o dejar el móvil sin parar de vibrar.

Lo iba a dejar. Pero si lo dejaba, la molesta llamada seguiría sin parar.

Entonces, contesté.

-Quien eres y qué quieres. -Dije tan seca como un cactus.

-Soy Drudis...-comenzó a decir. -Y te llamo de telefónica. -esa voz no era de mujer, era de un chaval de dieciséis años, o eso parecía.

-Mira chaval, si se trata de una broma, ya puedes ir colgando el teléfono ¿vale? -Volví a actuar seca.

-¿Cómo lo has sabido?- Su tono parecía sorprendido.

-Es obvio, tienes lo voz de un chaval de mi edad. -Contesté graciosa.

-Ya, bueno... CUELGA

Al colgar el teléfono, me tumbe en la cama.

Tras media hora en la cama con mi móvil, decidí ir a dar una vuelta por las bonitas calles de Andalucía. (Córdoba)

Me vestí con una blusa blanca, con mis shorts vaqueros y mis vans blancas grisáceas.

Salí a la entrada y agarré mi chaqueta de cuero, la cual me regalaron por mi anterior cumpleaños.

-¡Adiós mamá! -Grité ya en la entrada.

Agarré las llaves entre mis dedos índice y corazón y cojí mi bolso con el móvil, pañuelos y una barra de labios por si acaso.

Cojí el ascensor y le di al piso cero. En seguida, el ascensor empezó a bajar, hasta que bajó del todo.

Empecé a caminar por la calle, hasta que me caí al suelo mojado de la calle.

Un chico de dieciséis años aproximadamente, pasó por mi lado y miró. Yo le miré arrodillada en el suelo limpiándome los costados con las manos.

El chico paró a mi lado y me extendió la mano.

-¿Necesitas ayuda? -Me preguntó.

-No. -Me levanté y con una mirada firme le hice cambiar el rostro.

-Tu eres... -Comenzó a decir

-¿Tu eres el de Telefónica? -Pregunté entre risas.

-Si, ¿y tu eres la borde del teléfono?-Me dijo riendo un poco.

-Ja-Ja-Ja.- Reí sarcástica.

Una persona vino corriendo gritando un nombre.

-¡Frin!-Gritaba la voz.

-¡Jack! - Gritó el chico flaco de pelo rubio y ojos azules de "Telefónica".

Un chaval de quince años aproximadamente se acercaba corriendo a nosotros. Tenía el pelo de un rubio oscuro y ojos marrones. Era un poco más rellenito y más bajito que Frin.

Frin, (el de la broma telefónica) tenía un pelo rubio brillante y unos ojos grandes y que hipnotizaban.
A demás de una linda capucha blanca con dos pequeñas orejitas en los lados superiores de la cabeza y una mochila verde con varios bolsillos...

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Los personajes Jack y Frin ya sabréis quienes son... Fin y Jacke!! Sólo que en la vida real. Esta historia es como un fanfic de Hora De Aventuras... 😂.

Bueno, gracias por leer, y si te gusta, sigue leyendo por favor. Sakurita te lo agradesería😊😊

Bueno...
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