Aquí cuento una historia la historia de mi madre. Mi madre es una mujer de 36 años que se divorcio de mi padre cuando yo apenas tenia 5 años siempre la he visto sola ningún hombre pasaba nunca por nuestra casa,excepto mi tío que siempre nos ayudaba mucho, ya que económicamente mi madre casi no me puede mantener por que la despidieron hace un mes de su trabajo.
Yo he empezado un nuevo curso en un colegio nuevo, la verdad es que estoy bastante sola, es un poco duro estar tan sola en el instituto por que con 16 años y todo el mundo con su grupo de amigos y yo ando sola por los pasillos.
En la hora del almuerzo cuando voy a la cafetería siempre veo a un chico que estaba solo como yo. Estuve el primer trimestre sola pero luego me di cuenta de que ese chico venia conmigo a clase de Francés, así que a partir del segundo trimestre decidí sentarme con el. Era un poco tímido pero hasta que cogimos confianza me contó por que estaba solo me dijo que no mucha gente le quería por cosas que no me quería contar. Se llamaba Joe. No hicimos muy amigos eramos inseparables, las criticas de los pasillos no nos afectaban por que nos teníamos el uno al otro pero no eramos mas que amigos ya que el tenia una orientación sexual diferente a la mía.
Un día fui a su casa a comer el vivía solo con su padre ahora no recuerdo el nombre de su padre pero era rubio y tenia unos ojos azules igualitos a los de Joe. Siempre me pregunte que habría sido de su madre pero nunca le pregunte el tampoco me preguntaba sobre mi padre.
A ninguno de los dos nos gustaba hablar sobre nuestros padres pero teníamos demasiadas cosas en común además de que a los dos nos gustaban los chicos a los dos nos encantaba dibujar y leer. Nos solíamos prestar libros y y íbamos a casa de Joe o a la mía depende como nos diera y hacíamos concurso de a ver quien retrataba mejor al otro.
Un día Joe se quedo a dormir en mi casa y.
ESTÁS LEYENDO
The luck can change
FanfictionMi madre un una soltera ama de casa que después de miles de desgracias por las que ha pasado una persona va ha hacer que su vida vuelva a merecer la pena.