Hola chic@s!!! He tenido que retrasar mis vacaciones hasta agosto porque he encontrado trabajo así que he tenido que retrasarlo. Os informo que a la novela le quedan quince capítulos para terminarla definitivamente. Voy a escribir los mismos capítulos que en la primera temporada.
Gracias de todo corazón por el apoyo y los votos!!!
La semana siguiente fue tan rápida como dolorosa, extremadamente dolorosa. En el funeral hiciste todo lo posible para no llorar, no querías que los niños se pusiesen más nerviosos de lo que ya estaban. Las niñas no paraban de preguntar por Max y yo ya no sabía como explicárselo. Desde el fatídico día en el que perdí a una parte de mi vida, estaba recibiendo ayuda psicológica. De momento era yo la única que la estaba recibiendo, pero estaba planteándome que Alaïa y Chloe también la recibiesen. A los padres de Max no les parecía bien porque decían que era solo cuestión de tiempo que lo entendiesen y que aprendiesen a vivir con ello. Al principio les dije que les dejaría un tiempo para ver como iban evolucionando pero ya no aguantaba que me preguntasen por Max. El dolor que provocaba en mí tener que explicarles de tantas maneras diferentes lo que había pasado con su padre estaba empezando a hacer mella en mí, y ya no podía más. Sophie y Jos se habían ofrecido para llevarse a los niños unos días, pero me negué desde el principio. Sí seguía adelante y no me hundía era porque los niños estaban conmigo. Al morir mi padre yo me fui dos años a vivir con mis abuelos hasta que mi madre se recuperase del shock emocional de perder al hombre de su vida. Y aunque ya de mayor comprendí porque lo hizo yo no quería hacer eso con mis hijos. Nuestra vida había cambiado y la mejor manera de acostumbrarse a esta nueva situación era hacerlo juntos y que siguiesen con su mismo ritmo de vida. Era lo mejor para ellos y para mí.
Los padres de Max venían todos los días a ver como estaban los niños. Quizás era cosa mía pero me daba la continua sensación de que venían a vigilarme. Cuando Max todavía estaba con nosotros alguna vez se lo había comentado también. Sentía que no confiaban en mi forma de cuidar a mis propios hijos. Nada más entrar por la puerta la madre de Max se puso a limpiar y a ordenar y no pude más. Una cosa es que estuviese de luto, y otra cosa es que viniesen todos los días a cambiar mi ritmo y a cambiar mi casa. Yo era capaz de cuidar de mis hijos sola y podía llevar la casa sola.
-Juliette: Sophie por favor para. ¿Por favor podéis venir los dos al salón? De verdad os agradezco mucho la ayuda y que vengáis a ver como estamos pero necesito un poco de espacio.
No tenía ganas de discutir ni de conflictos, por eso se lo dije en un tono muy tranquilo. Pero a la madre de Max pareció sentarle muy muy mal lo que dije y se puso a gritar. Estaba totalmente descontrolada.
-Sophie: ¿Me estas negando ver a mis nietos? ¡Te recuerdo que son tanto tus hijos como lo eran de Max! ¡Y si te crees que me vas a prohibir que los vea estas muy equivocada! ¡Muy equivocada! ¡Que sepas que voy a pedir la custodia de mis nietos! ¡Cualquier psicólogo me hará un informe alegando que no estas mentalmente capacitada para cuidar a mis nietos! ¡Disfruta del poco tiempo que te queda con ellos! ¡Porque en poco tiempo no les volverás a ver!
-Juliette: ¡estas loca! ¡Quiero que salgas de mi casa y no vuelvas jamás! ¡Y que sepas que te voy a denunciar! ¡Loca, más que loca! ¡Te guste o no, que se que siempre no te he gustado, tu hijo me quería y adoraba a sus hijos! ¡Menos mal que no está aquí para escuchar lo que estás diciendo! ¡Mira bien a tus nietos porque es la última vez que los vas a ver! ¡Me has oído, la última vez! ¡¡FUERAAAAAAAA!! ¡¡FUERA DE NUESTRA VIDA!!
La madre de Max salió de la casa dando un portazo. Entonces las niñas corrieron a abrazar a Jos. No tenía nada en contra de que Jos y Victoria viniesen cuando quisiesen pero no quería que esa loca viniese a mi casa.
Una semana después
Victoria quedó impresionada con la actitud de su madre y decidió irse de casa. Aunque Sophie no tenía idea de ello, Victoria se había venido a vivir con nosotros. Ahora que Max ya no estaba Alaïa, Chloe y Gael eran lo único que les quedaba de Max. La verdad es que Victoria estaba siendo de gran ayuda para mí, mientras que yo me quedaba con Gael ella llevaba a las niñas a la guardería y a la tarde las recogíamos juntas.
Un día mientras Victoria acababa de salir de casa, recibí un mensaje de un numero desconocido. Era un mensaje muy raro. El mensaje decía lo siguiente:
______: Hay algo que no sabes de tu marido y de su muerte. Si quieres averiguarlo ven a la dirección que adjunto en el mensaje.
Al principio decidiste hacer como si no hubieses recibido el mensaje, y fuiste a por Gael que estaba llorando a pleno pulmón. Una vez que Gael estaba dormido otra vez, llamaste a un amigo que trabajaba en la policía. Él tenía el día libre para mi suerte y vino a casa.
-Juliette: hola Alvaro. Muchas gracias por venir.
-Alvaro: no las des Juliette ¿Que tal estas?
-Juliette: bueno poco a poco mejor. Hace unos días que Victoria la hermana de Max está viviendo con nosotros y me está ayudando un montón con las niñas. Y así yo puedo ocuparme de Gael.
-Alvaro: como me alegra oír eso. Bueno y cuéntame lo de ese mensaje. Bueno el mensaje es bastante claro pero como no sabemos de quien es creo que deberías ir acompañada. Vamos a hacer una cosa, irás tu con Gael y yo iré siempre cerca de ti. Así en caso de que pase algo yo te ayudaré.
-Juliette: está bien. Menos mal que has venido porque estaba totalmente perdida. Dame diez minutos que me preparo y nos vamos.
Enseguida estuviste preparada y nos dirigimos a la dirección. Cuando íbamos llegando Alvaro cruzó a la acera de enfrente y Gael y yo seguimos para adelante. Me alivió bastante que era una cafetería, y que había mucha gente. Como no sabías quien era la persona te sentaste en una mesa, y una vez que pediste un café le diste de comer a Gael. Entonces alguien te tocó el hombro...
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The Driver and The Nurse
RomanceTodo cambió en la vida de Juliette O'Connor con una decisión que sin ella imaginarlo cambiaría todo lo que conocía hasta el momento y conocería así al único y gran amor de su corta pero intensa vida.