Hoy es un día común y corriente como los demás, tengo que ir al colegio donde está mi "segunda familia" mis amigos, la verdad disfruto mucho estar con ellos, cada momento está lleno de risas, bromas...
También hoy tengo ensayo de una de las agrupaciones en la que estoy, tocar con esta banda es algo que no cambiaría por nada del mundo es algo muy bonito y lo hago porque me gusta la música.
Desde que me levante sentí una sensación rara como un mal presentimiento pero no le di ninguna importancia.
Estoy listo para irme al colegio me despido de mi mamá, me voy con mi papá y mi hermano. A ellos los amo mucho, yo haría lo que fuera por mí familia.
Cuando iba caminando hacia el colegio sentí como si me observarán pero no vi nada fuera de lo normal, antes de entrar un señor de una apariencia rara me paró.
- ¿Como te llamas muchacho?
-Daniel
Se me quedó viendo y me vio una cortada que tenía en un dedo de la mano izquierda, apenas vio que tenía esa cortada se fue corriendo, tenía un tipo de túnica, era demasiado genial.
El día pasó tranquilo como siempre, cuando salí del colegia, ya venía para mi casa cuando vi otra vez a ese tipo de la mañana, estaba en un árbol muy alto, parecía que me estaba siguiendo, seguí caminado y me di cuenta que seguía de detrás mío entonces le grité:
-¡¡Ya me di cuenta que me estás siguiendo!!
Se bajó de un salto del árbol como si fuera nada.
-No te estoy siguiendo.
-A no entonces ¿Qué estás haciendo? ¿Cómo te llamas?
- Me llamo Mateo y te estoy cuidando.
-¿Cuidando de qué?
-De los Templarios.
-Jaja que buena broma, eso no existe sólo en los libros y vídeo juegos.
-Son muy reales te lo puedo asegurar.
-Bueno digamos que son reales, ¿Qué tengo que ver yo?
Él me iba responder cuando de pronto un grupo personas nos acorraló, ellos tenían una cruz roja en la ropa, eso eran los templarios pensé que no existían, que era sólo un mito...
Había un templario con diferente ropa como si fuera más importante:
-Muy buen Mateo nos ahorraste mucho trabajo, nos estás entregando en bandeja de plata al "elegido".
-Ja, crees que me van a ganar por favor.
Creo que estaba muy confiado ya que eran como 7 contra 1, no creo que tenga oportunidad.
Y empezó a pelear sacó como un tipo de cuchilla de la manga de la túnica, sus movimientos eran limpios, sin equivocarse. Los estaba venciendo como si nada, eran más que él y con una cuchilla los venció eso fue impresionante.
El templario más importante ya no estaba, quien sabe que se había echo.
Le pregunté a Mateo:
-¿Estas bien?
-Sí, sólo un poco cansado me estoy volviendo un poco viejo.
-Eso fue impresionante ¿Cómo lo hiciste?
-Con mucho entrenamiento y con mi experiencia. Me imagino que tienes muchas preguntas pero antes tienes que saber que eres el que va a salvar a el mundo antes de que caiga en manos de los templarios.
-¿Yo? No puedo ser.
-Ahora ya no hay tiempo, te tienes que ir a tu casa enviaré a unos de mis estudiantes para que te cuiden.
-Espera no me puedes dejar con esto así, me tienes que decir todo ¿ Por qué yo? ¿Que tengo que hacer? ¿Quienes son ustedes?
-Vas a tener que esperar un tiempo, sólo tienes que estar alerta, nuestros enemigos nunca descansan.
-¿Qué? ¿Cuales enemigos?
Sólo se fue como llego por los árboles brincando de rama en rama, parecía que estaba haciendo Parkour.
Yo quedé sin palabras por lo que había pasado, me di cuenta que los cuerpos de los templarios ya no estaban y ni una sola pista de donde podrían estar esos cuerpos.
Llegue a mi casa le conté a mi familia, mi hermano no me creyó ni una sola palabra de todo lo que pasó pero mis papás me creyeron lo que había contado.
Pasaron los días sin saber nada de ese misteriosos hombre con túnica las dudas me dominaban, mis papás se veían preocupados como si supieran de todo esto.
Ya no se que hacer, tengo tantas preguntas pero lo peor es que nadie me da las respuestas de ellas.
Ahora solo me queda esperar a que llegue el momento de saber todo.
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Assassin's Creed Mi Historia
AcciónToda historia tiene un principio pero nunca un final...