Capítulo 2

142 8 2
                                    

Un teléfono comenzó a sonar haciendo eco en todo el lugar junto con el sonido de la alarma. La estúpida chica frente a mi atiende el teléfono sin quitarme la mirada de encima.

-¿Qué sucede, K?- contesta en tono molesto, espera unos segundos mientras la otra persona que está del otro lado del teléfono habla- Entiendo K, escaparemos por los túneles subterráneos. Muévanse rápido.- Corta la llamada y se dirige a su líder- ¡Halcón, tenemos que irnos la policía está cerca!

El líder de los Vlack, que sostenía a Sebastián del pecho con los puños cerrados, lo empuja haciéndolo caer al suelo mientras lo mira con recelo. Se encamina en dirección a su compañera para tomarla del brazo y encaminarse hacia a las escaleras.

-Dejaremos esto para otra ocasión, un placer saludarlos Slayers- dice con tono burlón y tanto él como su compañera comienza a correr por las escaleras.

Miro a Sebastián que ya se encontraba a escasos pasos cerca de mí- ¿Estás bien?- me ayuda a levantarme con cuidado, sosteniéndome de la cintura.- Esos imbéciles me las pagarán.

-Estoy bien- Trato de recuperarme del golpe en la espalda que hace unos momentos aquella perra me había propiciado- De ellos nos ocuparemos después, ahora tenemos que salir de aquí.

Comenzamos a caminar escaleras arriba, Sebastián toma el radio de nuevo, lo enciende y se lo lleva a su boca para comenzar a comunicarse- Marcos, ¿dónde estás?- esperamos varios segundos por alguna respuesta, sin embargo no sucede nada.- ¿Marcos?- Vuelve a dejar la línea en espera de alguna respuesta. Los segundos pasan de nuevo y comienzo a ponerme nerviosa al no obtener nada.

-¿Crees que les haya pasado algo?- el tono de preocupación en mi voz es evidente.

- No lo sé, iré a buscarlos. ¿Estás bien? ¿Crees que puedas salir de aquí y esperarme en nuestro punto de reunión? Nos queda poco tiempo- me suelta de la cintura solo para comprobar si puedo hacer lo que me pide. Me devuelve el radio para que pueda colocarlo en su lugar una vez más.

-Puedo con esto, pero ¿y si ellos ya están allá?- me estabilizo en mi cuerpo, sintiendo que el dolor en mi espalda es soportable. Llevo una mano a mi espalda y me sobo la parte baja de ésta tratando de recuperarme lo mejor que puedo.

- Me llamarás, no podemos confiarnos de que todos se encuentren bien tendiendo a los Vlack aquí- dijo volviendo a desenfundar su arma. Lo detuve.

Esa sensación de sentir que algo no andaba bien me volvió a invadir, sentí miedo que él se alejará de mí, es todo lo que tengo, es la única razón por la sigo en este mundo. No iba a dejarlo ir.

-No. No te vayas- lo abrace apoyando mi frente en su pecho, lo aferre a mí lo más que pude. No lo iba a soltar, no iba a dejar que se fuera. Mi cuerpo comenzó a temblar.

-Hey... ¿Qué pasa?- susurro en mi oído mientras me abrazaba por la cintura y me aferraba más hacia su cuerpo. Sentí su sonrisa- Todo estará bien Katya, no tienes de qué preocuparte.

Sentí un nudo en mi garganta que me impidió hablar. Levante mi rostro y me quite el pasamontañas que traía puesto. Él me imito llevando una mano a su rostro para despojarse del suyo.

-Todo estará bien, amor- posa sus manos sobre mis mejillas y me da un casto beso en los labios- Eres lo más hermoso que tengo en está jodida vida- vuelve a besarme- que no se te olvide nunca.

Sonrió a pesar del nerviosismo que se apodera de mi cuerpo, lo tomo de sus muñecas solo para mirarlo a esos hermosos ojos verdes que me hipnotizan por completo cada vez que los veo.

V.L.A.C.K. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora