Let's Make A Pact Tonight 3a Temp.

Capítulo 27.

Lo que Tom me había confesado anoche no me habían dejado volver a coger el sueño hasta después de un largo rato. 

Pero tenía taaaanto... Oí a papá gritar des del piso de abajo.

- SEA LO QUE SEA QUE ESTÉIS HACIENDO BAJAD YA! - 

Bill y yo seguíamos abrazados. Los gritos de cual gitano veniendo en un mercadillo nos despertaron. 

- Buenos días - dijo frotándose los ojos. Yo solo le sonreí.

Bill entró en el baño para ducharse y arreglarse para la entrevista. Yo bajé para irme al otro autobús y hacer lo mismo.

- Que haces con esta túnica? - preguntó papá burlándose de lo grande que me iba la camiseta de Tom.

Abrí la puerta del autobús para salir. Un montón de chicas empezaron a gritar ilusionadas pensando que sería alguno de los chicos. Enseguida se escuchó un "oh" general a modo de decepción al ver que era yo. 

Se escuchaba mucho murmullo, no podía entender lo que decían. 

Entré, me duché, me vestí y desayuné. Volví a salir para ayudar a llevar cosas dentro del estadio donde esta noche tocarían por primera vez. Pasé cerca de la valla que separaba a las fans de los vehículos de Tokio Hotel. Llevaba un amplificador de los pequeños, que aun así, pesaba lo suyo. Paré un momento para descansar.

- Eh, tú! - me giré - Quien eres? - era una fan de entre la multitud. Las otras se limitaban a escuchar.

- Soy la hija de David - 

- Ah, claro. La enchufada -

- Perdona? -

- Nada, déjalo - 

- Oye!! - gritó otra - estás con Tom? -

- Qué? No! Por qué? -

- Has salido con su camiseta, seguro que ya te lo has tirado! - esas chicas me empezaban a atacar.

- Para nada! Solo me prestó su camiseta para dormir - intentaba defenderme.

- Y que hacías ahí durmiendo? Tu padre ha salido del otro bus -

- Yo... - mierda no sabía que decirles - Joder, no estoy con Tom ni hemos hecho nada! - cogí el amplificador de nuevo y lo entré dentro.

- GUARRA!!! - oía insultos desde lejos.

MALDITAS FANGIRLS! No he hecho nada con Tom. Es más, me gusta Bill! He dormido con Bill! Tom solo es mi amigo, y a penas... Supongo que debía acostumbrarme, no sería la última vez que escucharía cosas así. No le di mayor importancia, yo sé lo he hecho y dejado de hacer. Esas niñatas no saben nada. 

Salí en busca de alguna otra cosa para traer y me encontré a Tom firmando autógrafos a las mismas chicas que antes me habían insultado. 

Una chica me señalo y él me miró. Yo le sonreí. Dejó de firmar y se acercó a mi. Todas las fangirls estaban mirándonos detenídamente. 

- Hola - dije aún sonriéndole.

- Me alegro de que no me hayas dejado de hablar - dijo también sonriendo.

- Por qué debería? - me sorprendí.

- Ya sabes, por lo que te dije ayer de que me gustas... - bajó la mirada al suelo. Estaba avergonzado.

- DIOS LE ACABA DE DECIR QUE LE GUSTA! - gritó una fan histérica. Giré mi cara y la miré con una mirada de esas que si pudieran matar... Volví a Tom.

- Nunca podría dejarte de hablar por algo así - aunque en un principio no me lo creyera, estaba empezando a pensar que me lo había dicho en serio. 

- Gracias - volvió a levantar la mirada y se acercó a mi para abrazarme. No se lo pude negar, la verdad... Lo había echado de menos.

- DIOS DIOS DIOS ESTÁN JUNTOS! ESTÁN JUNTOS! - odiaba esos chillidos. 

- Será mejor que entremos. Se están volviendo locas - 

- Sí. Que estamos juntos, dicen. Te lo puedes creer? No tienen ni idea - fingió una pequeña risa que a la vez mostraba tristeza.

Maldito Tom, no hagas eso! 

- BILL!!!! BIIIIIIIILL!!!!!! - me giré y vi que Bill venía corriendo.

- Esperádme! - nos gritó. Pasó por delante de las chicas y firmó unos pocos autógrafos. Enseguida estaba a nuestro lado. - Os podéis creer que me acaban de preguntar si estoy celoso de ti - me señaló - porque estás con Tom? - soltó una carcajada.

- En serio? - dijo Tom - Si supieran lo mucho que se esquivocan! Los novios aquí sois vosotros! - él también se rio. Ahora parecía que relamente le hacía gracia. Era raro, cuando Bill estaba cerca, o cualquiera de los chicos, es como si sus supuestos sentimientos hacia mi desaparecieran. Sabía disimular muy bien, menos cuando estaba a solas conmigo. 

Bill ser rio y pasó delante. Cuando no lo veía Tom soltó un suspiro profundo. 

En ese momento me di cuenta. Mierda. Era verdad. Relamente Tom estaba enamorado de mi y no quería que nadie se enterase. Ni siquiera Bill.