Diario de una Escritora más...

Diez...

Desperté con el sonido de mi teléfono, lo tome y era un mensaje de Seb.

- Hola Rebecca - Por muy odiosa que quisiera ser, me limite a solo responder.

- Hola Seb.

- ¿Cómo estás?

- Por ahora bien y ¿tu?

- Pues no mucho.

- ¿Que paso?

- Es que... mejor te mando una foto.

La foto de un chico en el suelo con dos botellas de alcohol en la mano, una rota y la otra casi vacía, me impactó por completo, al parecer era Alex.

-¡Oh por Dios! – respondí al ver la foto.

- Él se salió de control y mis padres no están... te llamaré.

En menos de 3 minutos mi teléfono sonó.

- Hola -Dije.

- Necesito ayuda.

- Pero mía no, lo siento Seb.

- Pues, no tengo a nadie más.

- Por favor, puedes llamar a cualquier persona y querrá ayudarte, pero yo no puedo Seb.

- Es que enserio no puedo – Bufé - Mira escucha... -Se oía la voz de Alex gritando mi nombre. - Vez él te quiere es a ti Becca.

- Estas hablando con ella -Se oyó decir a Alex.

- Calla Alex -Dijo Seb.

- Espera veré si puedo ir.

- Gracias Becca.

Corte la llamada y fui a la habitación de Cristian, él no estaba así que lo llame.

- Hola -Era la voz de Edgar.

- ¿Edgar?

- Si Cristian no puede hablar ahora.

- Edgar es Becca, dale el teléfono a Cristian que necesito hablar con él.

- Creo que eso no se podrá Becca - ¿Como que no?

Mi preocupación aumentó.

- ¿Edgar porque no me puedes pasar a Cristian? - Alce la voz.

- Es que... estamos en un bar y él está muy mal.

- Ustedes nunca se cansan -Chille

- Es hora de ir a casa, iré para allá.

- ¡No!, espera dime donde estas e iré, necesito que me lleves a un lugar.

- Ok nena, te llevo donde quieras -Bufé- Estamos en...

Se cortó la llamada.

No puede ser. Intente llamar nuevamente pero no contestaban. Llame a Seb, no sabía que iba hacer y no podía ir a su casa, así que tendría que decirle que no podía ir.

- Becca - Su voz era ronca.

- Seb creo que... -Me interrumpió.

- No es Seb, es Alex.

- Alex comunícame con Seb.

- ¡No! –Grito y colgó.

¿Qué ocurría con los hombres hoy en día?

Un mensaje llego a mi celular:

- Estamos en Slicks -Era de Edgar.

- No puedo ir hasta allá.