Reflexión Poética

Inefable

Indispensable eras, tal un cuerpo con su corazón
Inefable eras
Y digo eras,
Por que lo indispensable me afirmaba
Que tú, y sólo tú,
Me daban esas ansias de seguir latente
Me motivabas a superar la vida
¿Qué sucedió? Probablemente te preguntarás,
A lo que enérgicamente responderé
Desde el fondo de mi voz:
Uno cree su corazón entregado,
Suspirante, alborotado,
Cual típico enamorado
Suponías tal vez
Que al amarme
Y lo que sentías interiormente,
Yo debía saberlo.
Olvidaste que dicha palabra
No significa nada sin hechos
Podrías jurar ahora que me amas
Pero
¡no me lo dijiste!
Mi amor se ha marchitado
Cual flor que en algún momento
Bella, grácil
Gozaba del amor del señor sol
Nutriéndola tiernamente,
He ahí la diferencia,
La flor lo sabía,
El sol se lo demostraba.
Nunca me incluíste a tu vida
Tú, y sólo tú
¿Querías demostrar acaso, que puedes sólo en esta vida?
¡CUAN ERRÓNEO PENSAMIENTO!
Ya al final de dicho testamento
Espero haberte ilustrado
Mientras yo, me resguardo
Rescatando inútilmente, cada caricia, cada abrazo.
Que tontería enamorarme.
Se acerca el final,
De este poema
No quiero culparte
No quiero dañarte
Sólo quiero, que aprendas de esta
Y que llegue quien te ame,
como yo no supe hacerlo.