Si, otro dia normal para mi. Levantarse, cambiarse, cepillarse los dientes, desayunar, ir a la escuela, aburrirme ahí, escaparme, llegar a casa, y estar todo los días en la computadora.De todas formas, la vida de cualquiera es mas interesante que la mía, ya que siempre estoy sola.
Soy rica, tengo una mansión, la habitación mas grande con una vista hermosa hacia la piscina, mucha ropa, un chef, un mayordomo, una sirvienta y voy a la escuela mas académica y mejor del país.
Se podría decir que lo tengo todo, aunque ese es mi mayor secreto, nadie sabe de esto. Mis padres trabajan todo el dia asi que hay meses que no los veo.
Pasando navidades y años nuevos sola.
Pero...¿por que nadie sabe de esto?
Soy invisible. No soy la típica nerd, odio estudiar y soy muy rebelde. Pero tengo ese don de que nadie me note.
No tengo amigos desde esa vez, pero no pienso contar eso, es estúpido y una larga historia.
Y es gracioso, por que la mayoría de los estereotipos basados, la chica rebelde es fuerte y sociable y no le tiene miedo a nada.
Y si, yo no le tengo miedo a nada, pero no soy nada fuerte. Me gusta cometer riegos pero ya no tiene ningún tipo de aventura.
Me puse mi uniforme y mi chofer me llevo a cinco cuadras antes de la parada de autobús. Le salude y me fui.
Luego, subí al autobús y juntos a los chicos de mi instituto, íbamos al colegio.
Al llegar, veía como cada uno salia riendo y saludaban a sus amigos. Abrazos, risas y temas de conversaciones que jamas acabaran.
De pronto mi teléfono comienza a sonar.
— ¿Si? — Conteste sin mirar quien era.
— ¡Hola hija! ¿Como estas? — Pregunto mi madre feliz de oír mi voz.
— ¡Mamá! ¿ Hoy vienes a casa? ¡Ya se! ¿ Que te parece si vamos al cine? ¡Ah, y avísale a papá! — Dije emocionada.
— Eh no...de eso queria hablarte...mira, yo y tu padre este mes estaremos ausentes, lo sentimos mucho...- Su voz se cortaba.
— Ah, eh...¡Esta bien! No hay problema...— Hable con mucha falta de aliento.
— Te amamos, esto lo hacemos por ti...¡Ya se! ¿Por que no invitas a tus amigos? — Detrás de ella, se podia escuchar como los pasos y las conversaciones retumbaban en la sala.
— ¡Si, eso haré! Te quiero, adiós. — Corte la llamada y seguí caminando. Mis ojos se aguaban y sentía presión en mi pecho.
¿Que amigos? ¿ La Sr. y el Sr. Peperson?
No son reales.
Entre y me dirigí a mi salón. La clase 1 D, para los chicos revoltosos y vagos.
Siempre perdemos en la competencias del cole y si...somos los estúpidos, al igual que las personas de otros años que pertenecen al D.
¿Y saben otra cosa internaste? Es que mis profesores me odian por mis calificaciones y por escaparme, y hablaron con mis padres miles de veces.
Pero ellos, siguen pagando por mi conducta. Es...tonto.
Pase por el pasillo entre los bancos y cada bola de papel que se tiraban, pegaba a mi. Pero ellos seguían, como si el papel solo cayo al suelo.
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Una chica tan invisible (EN PAUSA)
Teen FictionHola, soy Miranda Lerner. Primero, me presento. Tengo 16 años, soy una vaga que esta todo el día en su casa, acostada viendo Netflix y comiendo chatarra, explicación de la cual soy gorda y una sedentaria de por vida. Ademas de que, soy una persona...